Tres nuevos fallecidos y 208 positivos durante la última jornada en la Región de Murcia

La Región de Murcia tiene una tasa de incidencia del coronavirus de 155 casos por 100.000 habitantes en catorce días y de 63,2 en la última semana, lo que ha suavizado la presión asistencial y significa una evolución muy positiva en el control de la pandemia en todo el territorio murciano, salvo en los municipios ribereños del Mar Menor.

Así lo ha puesto de manifiesto en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal del Consejo de Gobierno el titular de Salud, Manuel Villegas, quien ha informado de que la región ha sumado en las últimas 24 horas tres fallecimientos -dos mujeres y un hombre de entre 79 y 93 años de Cartagena, Cieza y Caravaca- y 208 nuevos positivos que elevan a 3.381 el número de afectados en la actualidad.

De esa cifra, según Salud, 3.114 se encuentran en aislamiento domiciliario y el resto (267) ingresados en hospitales, de los que 67 están en cuidados intensivos.

El número de casos confirmados desde el inicio de la pandemia se eleva en esta comunidad a 55.511, el de curados a 51.488 y el de fallecidos suma 642.

“Seguimos mejorando día a día”, ha dicho el consejero murciano antes de insistir en su llamada a la responsabilidad de la población, ante la proximidad de las fiestas navideñas, “si no queremos tener una tercera oleada en enero, con lo que eso significa de problemas para la sanidad, la economía y, lo que es peor, para la pérdida de vidas humanas”.

Manuel Villegas ha apelado a que la sociedad tome conciencia de que “van a ser unas navidades distintas” porque la pandemia obliga a restringir al máximo la actividad social y familiar. “Tiene que saber la gente a qué estamos jugando”.

En cuanto a la situación del Mar Menor, el consejero ha explicado que se está produciendo una subida de casos en los municipios de la comarca sino que no se produce en la misma medida que en el resto de la Región el descenso de la incidencia.

“La incidencia todavía se mantiene en cifras aceptables” en el Mar Menor, ha añadido Villegas, quien ha explicado que los servicios de salud pública trabajan en colaboración con las empresas agroalimentarias que han tenido casos para realizar cribados y asegurar la no transmisión a familiares de los trabajadores afectados.