Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Gobierno y PP reducen a un acuerdo mínimo en vivienda la Conferencia de Presidentes
Incertidumbre en los Altos del Golán mientras las tropas israelíes se adentran en Siria
Opinión - ¡Con los jueces hemos topado! Por Esther Palomera

Por qué no podemos esperar

612.080 aragoneses han acudido a las urnas hasta las 18:00 horas

Yeison García

Candidato de Unidas Podemos al Congreso por Madrid —

Dentro de unos días, exactamente el 28 de abril, tendrá lugar una de las elecciones generales más importantes que se han celebrado en nuestra democracia. Tendremos que elegir entre la defensa y ampliación de los derechos y avances democráticos conquistados a lo largo de la historia por diferentes movimientos sociales o el retroceso político y social que la derecha y la extrema derecha quieren llevar a cabo en nuestro país.

Las políticas neoliberales aplicadas por el PP y el PSOE durante años han incrementando enormemente la desigualdad en nuestra sociedad. Es en este clima social de inseguridad y miedo en el que, tanto la derecha como la extrema derecha, han dirigido todos sus esfuerzos en buscar chivos expiatorios para desviar la atención de los que son culpables de esta crisis, de los que han seguido enriqueciéndose mientras nosotras nos apretábamos cada vez más el cinturón para llegar a fin de mes.

Uno de los grupos sociales más golpeados por la crisis económica somos el de las personas de origen migrante. Son muchos los testimonios y realidades cercanas las que me tocan, la fuerza e imaginación de las personas migrantes para enfrentar las diferentes barreras institucionales que nos encontramos en nuestras vidas cotidianas contrarrestan toda la desfiguración a la que somos sometidas en los discursos racistas y xenófobos de la derecha y la extrema derecha.

Estos partidos juegan con la idea de lo desconocido, del diferente, del otro lejano. Cuando pienso en todo esto, pienso en que llevo aquí desde los 9 años y me pregunto ¿Cuándo dejaré de ser el otro? Le pregunto a mi madre y a mi padre que llevan más de 20 años aquí ¿Cuándo dejaréis de ser la otra y el otro? Y pregunto a la sociedad ¿Cuándo dejaremos de ser los otros y otras? Sé que la respuesta es nunca, sin embargo, no estamos aquí para asimilarnos, ni romper con nuestros orígenes, hoy nos levantamos, al igual que lo hicimos ayer y lo haremos en el futuro por nuestros derechos, la democracia y la justicia social.

¿Sabéis que a una parte de nuestro país se le niega el derecho al voto? ¿Cómo le explicarías a una persona que ha nacido y se ha criado aquí que no puede participar en las próximas elecciones generales? Safia El Aaddam hizo una pregunta parecida a toda la sociedad y ha hecho un llamamiento por redes sociales para que todas aquellas personas que se van abstener en las próximas elecciones cedan su voto a una persona de origen migrante. Ella recoge el testigo de otras campañas que ya se han hecho años anteriores con el mismo objetivo, garantizar la participación de la población migrante en las elecciones generales.

Mi madre estuvo muchos años luchando contra todo trámite burocrático que se le ponía por delante para conseguir que mi hermano y yo tuviéramos la nacionalidad. Su acto de resistencia política consiguió que los tres obtuviéramos DNI y pasaporte, para, de esta manera, pasar a formar parte de ese amplio número de personas de origen migrante nacionalizadas. Comunidad migrante con derecho a voto. Somos alrededor de un millón y medio de personas.

Esto es de suma importancia, porque más allá de la necesaria redefinición que tenemos que hacer del concepto de ciudadanía, de la separación que tiene que haber entre el derecho al voto y el conseguir la nacionalidad, es decir, que el derecho al voto se relacione con x años de residencia; existe una urgencia, debemos actuar en el ahora y este nos dice que debemos activar el Poder político migrante.

Tenemos una misión histórica que debemos cumplir juntas: defender y ampliar los derechos y avances sociales conquistados.

Queremos seguir siendo ecuatorianos, colombianas, peruanos, etc., queremos abrazar las culturas de nuestros padres y madres, sus lenguas, sus sensibilidades, sus (nuestros) modos de vida, su arte, sus espiritualidades, valores y cosmovisiones ante la vida y, a la vez, también queremos y tenemos el derecho a ser también españoles. Esto es lo que niega la extrema derecha y la derecha, esto es lo que niega el hecho de que una parte de nuestra sociedad no pueda participar en las próximas elecciones generales.

No podemos esperar a que no se diga Poder migrante, no podemos esperar a que no se apele a la población de origen migrante, nacida, criada o que habita en este país, cuando estos que dicen que quieren volver a los ideales de la reconquista nos señalan a nosotros y a nosotras.  

En ese no esperar la plataforma “Poder migrante” ha impulsado una campaña política dirigida al voto migrante: “NuestroVotoCuenta”. Esta acción nace con el fin de visibilizar las reivindicaciones de este colectivo y, a su vez, movilizar a toda la población migrante, con derecho a voto, para que demos un paso hacia adelante en aras de defender nuestros derechos colectivos y enfrentar el crecimiento de la extrema derecha.

Esta junto a la derecha y, en muchas ocasiones los que se dicen llamar socialistas, niegan lo que renace y florece en las aulas de nuestros colegios. Si os dais un paseo a la hora de la salida de un instituto, veréis que allí tenéis un compromiso político, mirad a la persona que está a vuestro lado, al igual que tú, está volviendo del trabajo, allí tienes un compromiso político, la solidaridad y la fraternidad entre los de abajo debe ser nuestra utopía emancipadora.

Hay que romper con la visión utilitarista e instrumentalista de la migración, la igualdad de derechos es una cuestión de justicia social y, por tanto, nos afecta a todas, dado que el hecho de que una parte de nuestra sociedad no pueda participar en las elecciones deteriora enormemente nuestra democracia y abona el terreno para que aquellos sigan buscando chivos expiatorios en los otros, en los excluidos del proceso electoral.

El 28 de abril tenemos una enorme responsabilidad política, “cede” tu voto o vota con la idea clara de que estamos dando un paso más hacia la construcción de una sociedad que no deje a nadie atrás.

No podemos esperar porque no estamos por llegar, ya estamos aquí.

Etiquetas
stats