Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

“Que Aznar dijera que él responde de lo suyo fue meter el dedo en el ojo a Rajoy”

Mariano Rajoy y José María Aznar, durante el arranque de la convención del PP.

Luz Sanchis

Un día después de la diatriba de José María Aznar en el arranque de la convención del PP, este sábado ha quedado claro que la consigna es hacer de la necesidad, virtud. Como si reconocieran que les riñó, pero por su bien. Uno tras otro, todos los dirigentes que se colocaron ante un micrófono compitieron en elogiar las palabras del expresidente y se negaron a admitirlas abiertamente como una bronca a Mariano Rajoy. Solo Borja Sémper ha dicho a las claras que algunas frases no le sentaron bien y que no hay por qué comprar todo el discurso de Aznar “porque el PP no es una secta”. En el otro extremo, el disciplinado Carlos Floriano: “Magnífico. Me encantó. Fueron reflexiones muy importantes que nos vienen muy bien”.

Pero sin micrófonos ni las obligaciones de ser escudero de María Dolores de Cospedal, algunos se han atrevido a decir lo que a nadie se le escapó: que Aznar fue “a motivar”, pero también “a reñir”. Y que se le fue la mano. Sobre todo, cuando se refirió a la corrupción interna como si hubiera empezado cuando él ya estaba fuera del día a día del PP.

“Venir a decir que él respondía de lo suyo fue meter el dedo en el ojo a Rajoy”, admite uno de ellos. Las críticas, más o menos veladas pero públicas de Aznar a Rajoy siempre provocan una sacudida en el partido. Pero la del viernes fue donde más dolía: al hablar de corrupción interna y acusar al presidente del Gobierno y a la dirección de desganados y faltos de garra.

“No hace falta preguntarse si el PP realmente quiere ganar para animar, pero el caso es que lo consiguió”, cuenta este miembro con cargo orgánico tanto en la época de Aznar como después con Rajoy. “Ya sabemos cómo es y cómo habla, pero reconozco que cuando dijo eso, me dolió dentro”, explica. La parte buena es que en el plenario se le aplaudió en varios momentos y “eso no es fácil con un discurso largo, duro y tan político”.

El miedo a la abstención y a Podemos ha calado en las filas del PP y el apoyo de Aznar es la mejor garantía de que los votantes más conservadores no se queden en casa. Y para escenificar el respaldo a las víctimas del terrorismo, nadie mejor que él para hacerlo con contundencia. De hecho, para ellas fueron las primeras palabras: “Tal día como hoy hace veinte años yo estaba en San Sebastián enterrando a Gregorio Ordóñez”.

Como método para movilizar a las bases más conservadoras, Aznar funciona, defienden los consultados. Y ante unas elecciones difíciles, aparentar unidad es vital, aunque Rajoy y el expresidente no mantengan una buena relación.

El domingo responde Rajoy

Durante la segunda jornada de la convención, Rajoy ha huido de los periodistas. Tras mantener un encuentro con miembros de NNGG, con ataque incluido a Podemos a cuenta de la beca de Iñigo Errejón, los guardaespaldas han impedido que la prensa pudiera preguntarle por Bárcenas o por Aznar. Mientras, miembros de su equpo en Moncloa emplazaban a escuchar la respuesta en el discurso de clausura en el que lleva trabajando hace tiempo. “Será potente y se comprobará que tenemos relato”, repetía su jefe de gabinete, Jorge Moragas.

Etiquetas
stats