El Síndic pide proteger “de inmediato” a los menores que duermen en la calle

El Síndic de Greuges, Rafael Ribó, ha instado este martes a la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA) a proteger “de manera inmediata” a los menores extranjeros no acompañados (menas) que duermen en iglesias y calles de Barcelona.

La Parroquia de Santa Anna de Barcelona, que desde hace dos años funciona durante el día como “hospital de campaña” para acoger a personas sin techo, informó ayer de la situación de muchos menores que viven en la calle y que pasan por la iglesia para dormir y descansar durante el día.

Esta situación, según el Síndic, “supone una vulneración flagrante de la Convención de los Derechos del Niño”, por lo que insta a las administraciones públicas “a extremar los esfuerzos de coordinación y actuación interadministrativa” para atenderles.

El Síndic ha sugerido a la DGAIA y al Ayuntamiento de Barcelona que “actúen de manera inmediata” para atender las necesidades de estos menores, algunos de los cuales han huido de los centros de acogida donde estaban alojados.

El defensor de los catalanes ha pedido a la DGAIA que le informe sobre el número de niños que se hayan detectado en esta situación y las medidas acordadas, en coordinación con el Ayuntamiento de Barcelona, ??para protegerles y atender sus necesidades.

Ribó recuerda que “los niños y los adolescentes migrantes que están en Cataluña tienen los derechos que reconoce la Convención sobre los derechos del niño y las leyes de protección de la infancia, y especialmente tienen derecho a ser escuchados y a recibir información de forma comprensible sobre cualquier actuación que afecte sus derechos”.

En cuanto a la atención de los niños que duermen en la calle, el Síndic pide que los equipos técnicos lleven a cabo “planes individualizados de atención” y que se activen “las medidas inmediatas que mejor respondan al interés superior de cada uno de ellos”.

“Los niños migrantes sin referentes familiares son, ante todo, niños y, como tales, tienen derecho a disfrutar del mismo nivel de protección que cualquier niño, de acuerdo con el principio de igualdad y no discriminación que recoge el artículo 2 de la Convención sobre los Derechos del Niño”, abunda el síndico de agravios catalán.

Ribó también recuerda que “los niños migrantes no deben ser etiquetados como conjunto. Cada niño presenta una trayectoria y unas necesidades particulares” que el Síndic urge que sean atendidas y abordadas por las administraciones públicas competentes.