La vertiente judicial de la violencia de género en España no ha variado excesivamente durante el año pasado y lo que se ha movido ha sido al alza. Siete de cada diez procesos judiciales por violencia machista en 2018 han terminado con una condena, según el Observatorio del Consejo General del Poder Judicial. Es el máximo histórico y supone un incremento del 3,1% respecto al curso anterior.
A modo de radiografía general sobre la dimensión de la violencia extendida por España, los registros de los juzgados reflejan que unos 3.000 hombres de media al mes recibieron una condena por maltratar a una mujer.
Las denuncias por estos asuntos se mantuvieron bastante estables a lo largo de 2018 al registrarse 166.961, apenas un 0,4% por encima del volumen recibido en 2017. Las denuncias fueron presentadas casi a partes iguales por mujeres españolas y extranjeras.
Entre los datos del Consejo de General del Poder Judicial, también se observa que las solicitudes de órdenes de protección tuvieron una variación leve al alza hasta alcanzar 45.045 (1,75% más). Casi un 70% de las peticiones fueron atendidas. La mitad de estas medidas llegaron a mujeres que todavía mantenían la relación afectiva con el presunto agresor.