Recortes en los comedores escolares de Aragón: el Gobierno de PP propone cubrir las bajas con un servicio de cáterin
Las ausencias por asuntos propios o vistas médicas que implican un desplazamiento no se van a cubrir en los comedores escolares de la provincia de Huesca. Así lo denuncia José Luis Cabrero Laliena, Oficial 1ª de cocina del CEIP Asunción Pañart de Aínsa, que asegura que es practicamente “imposible” sacar adelante el servicio del día si falta personal. El Departamento de Educación del Gobierno de Aragón explica que las ausencias puntuales “se cubren recurriendo a servicios prestados por terceros colaboradores de la administración” aunque reconce que en ocasiones no se encuentran sustitutos y “ante la posibilidad de sanciones por parte de Inspección de Trabajo, no vemos viable poder gestionar las ausencias sobrevenidas de carácter puntual del personal de cocina y comedor”.
Cabrero denuncia que “siguen los recortes en educación como en todos los servicios públicos. Es una puntilla más. Llevo 14 años trabajando en Aínsa y siempre se habían cubierto los días de ausencia, pero este año han decidido que no”. El Servicio Provincial de Educación de Huesca ha emitido un comunicado de aclaración en el que se expone que en ocasiones hay que recurrir a empresas externas y que hay que comunicarlo con más de 48 horas para no incurrir en sanciones por parte de Inspección de trabajo, por ello exponen no ver “viable” poder gestionar estas ausencias. Sin embargo, el cocinero explica que este tipo de falta al puesto de trabajo se comunican con la suficiente antelación porque no son imprevistos.
En el centro en el que trabaja hay implementado un proyecto de comedor sostenible con alimentos ecológicos y locales: “Si falta personal, no podemos limpiar la verdura que compramos al hortelano de Boltaña y debemos recurrir a congelados y precocinados para garantizar el servicio. En otros centros, con menos plantilla, hablan de vajilla desechable, de hacer un solo plato o de reducir la cantidad de comida”, alerta Cabrero. Según un comunicado difundido por el propio trabajador, la falta de sustituciones afectará también a centros como el CEIP Aragón de Monzón, con 160 comensales, donde solo habrá una persona para preparar la comida y limpiar el material. En Aínsa, con 220 comensales y 20 dietas especiales, los responsables tendrán que recurrir a alimentos congelados los días en que falte personal: “Lo que quieren es implantar líneas frías, como pasa en casi todos los centros de Aragón”, denuncia Cabrero.
El Departamento de Educación recomienda que, ante la ausencia de personal, los centros pueden preparar un menú alternativo de fácil ejecución o contratar un cáterin de uno o dos platos. Cabrero critica esta medida: “El salario de una sustituta por seis horas es de 31,24 euros, coste que asume el propio centro con las cuotas del comedor. Imaginen lo que costaría un cáterin para 220 comensales. Parece que lo que buscan es externalizar el trabajo en lugar de garantizar los derechos del personal y la calidad del menú”.
El trabajador recuerda que hace 14 años vivió una situación similar y que, tras pelear con el Servicio Provincial, logró que se respetaran los derechos del personal y se mantuviera la capacidad que marca el convenio: “Ahora nos dicen que, si tenemos un día de asuntos propios, preparemos la comida el día anterior como si tuviéramos tiempo de sobra. Esto es inviable y no garantiza la seguridad ni la calidad alimentaria”.
Cabrero subraya que los comedores escolares no cumplen únicamente la función de dar de comer a los niños: “Podrían ser una herramienta de concienciación sobre alimentación saludable y sostenible. Con estas medidas se está desperdiciando un recurso educativo valioso”.
Desde el Departamento de Educación defienden que buscan “ayudar a los centros a gestionar de manera eficiente el comedor, conscientes de que los equipos directivos conocen mejor sus circunstancias y posibilidades”. Aseguran que siempre se sustituyen las ausencias con las bolsas de trabajo, pero que hay ocasiones en las que “no hay candidatos que opten a determinados puestos, y a fin de evitar demoras que impacten en el servicio, las ausencias puntuales se cubren recurriendo a servicios prestados por terceros colaboradores de la administración. Es reseñable que, hoy en día, existen difcultades para incorporar personas por falta de disponibilidad inmediata, incluso por las entidades colaboradoras”. Por ello, recomiendan a los centros “tener preparado un menú alternativo de fácil preparación para poder afrontar el servicio con la menor sobrecarga posible del personal, así como la posibilidad de contratar uno o dos platos en un servicio de cáterin”.
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