Lourdes Madrid, fotógrafa: “La violencia de género hay que cuestionarla, no es normal que ocurra día a día”
Nació en Ciudad Real, aunque es toledana de adopción. Lourdes Madrid de define como “feminista y activista”. Se dedica a la fotografía y confiesa que tiene predilección por la temática social. Desde este lunes expone en la Casa de la Cultura de Orgaz (Toledo). Con la muestra Detrás de la puerta deja patente su inquietud por sensibilizar a la población sobre la violencia de género, por visibilizar todas esas historias que ocurren en la intimidad de una casa y que, a veces, no salen de ahí cuando se cierra la puerta.
A pocos días de celebrarse el 25N, el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, se muestra crítica con la percepción social sobre la violencia machista que, en los últimos tiempos, parece haberse normalizado. Y se rebela. “Cada vez nos impactamos menos”, lamenta. Esa es una realidad que, en su opinión, tiene que cambiar. “El asunto en sí no es el final, que es el asesinato de esa mujer, sino la serie de acontecimientos que van marcando durante años de su vida a esa mujer y que acaba de esa manera”.
Lourdes se muestra tajante en lo que se refiere al término “normalizar” algunas situaciones. “La violencia de género no se puede normalizar, porque eso hace que se invisibilice socialmente. Hay que cuestionarla, no es algo normal que tenga que ocurrir en nuestro día a día”.
Se muestra preocupada por el “discurso de la extrema derecha en España” porque, dice, “muchos señoros están tratando de volver a aquellos tiempos en los que la mujer vivía para ponerse el delantal y preparar la comida al marido y niegan la violencia machista. No podemos permitir esos discursos negacionistas” que, además, están influyendo en los sectores de población más jóvenes.
Muchos señoros están tratando de volver a aquellos tiempos en los que la mujer vivía para ponerse el delantal y preparar la comida al marido y niegan la violencia machista
Para ella, lo fundamental para “atajar la violencia machista empieza por la educación, educando a los jóvenes hacia un sistema igualitario entre hombres y mujeres. Cuando tengamos una educación de base sobre esta realidad nos llevará a entender la igualdad como tal, no a superponernos unos a otros, sino a estar en el mismo escalón”.
Su amor por la fotografía empezó en su adolescencia. “Me ha gustado desde siempre. Mi padre tenía una cámara antigua, una Wersila, y aunque no la tocaba mucho, cuando me la dejaba era una maravilla”, relata. La captación de imágenes es un hobby que ha aprendido “de manera autodidacta” y que le ha servido para denunciar situaciones sociales e historias “dolorosas”. Parte de su trabajo pasa por darles visibilidad.
Como en su última exposición: una muestra en blanco y negro, donde las protagonistas son estas mujeres que “sufren día a día” y en la que ha querido “plasmar esa sensación de presión y de ansiedad por la situación que viven”.
La ausencia de color tiene una explicación y es “evitar distraer al espectador”. Durante la conversación nos cuenta que “las fotografías también reflejan un mundo en el que los colores han desaparecido, y el mensaje que quiero transmitir en blanco y negro cobra más fuerza”. Lourdes quiere transmitir “la cadena de hechos que llevan a la muerte de esa mujer por violencia de género y que, si cortamos esa cadena cuanto antes, es posible que no llegue a ocurrir ese desenlace”.
La fotógrafa también se muestra crítica con cómo el uso de los dispositivos móviles y las redes sociales influyen en perpetuar comportamientos machistas. “En los tiempos que vivimos, mucha gente joven y digo esto sin sentido peyorativo, cuando empieza una relación amorosa, a veces consiente ciertos comportamientos que son perjudiciales, como el control a través del móvil, donde se pide a la pareja una ubicación, una foto para comprobar que es verdad lo que se dice... y al final tolerar eso acaba transformándose en un problema”, matiza.
“Hay que educar a los jóvenes hacia la igualdad”
Lourdes también reivindica el papel de la sociedad en las situaciones de violencia machista y cómo hay personas que “se desmarcan”. “Cuando ocurren agresiones de este tipo tenemos la obligación de denunciarlas. El argumento de son cosas que pasan en las casas no es válido, porque no son cosas que tengan que pasar. Es algo que puede ocurrirle a cualquiera y tenemos que pararlo”, expone Madrid.
'Detrás de la puerta' quiere “remover conciencias” y la propia Lourdes señala que a veces, al realizar las fotografías con las modelos y “mirar por el objetivo lo que iba a retratar me impresionaba mucho”. Esta exhibición tiene un largo recorrido. Su carácter itinerante en Castilla-La Mancha le ha permitido a la autora comprobar en primera persona las reacciones de quienes miran su trabajo. “Se les saltaban las lágrimas, quizá porque les recuerden a situaciones o emociones que han vivido”.
Cuando ocurren agresiones de este tipo tenemos la obligación de denunciarlas. El argumento de son cosas que pasan en las casas no es válido, porque no son cosas que tengan que pasar
Una forma de “acercar realidades al mundo rural”
Lourdes Madrid apuesta también con su trabajo por “acercar este tipo de realidades al mundo rural”. La muestra ha recorrido ya otros lugares de la región, como Villarrubia de los Ojos, en Ciudad Real. “Es muy importante”, defiende la fotógrafa.
Lourdes Madrid nos adelanta que está preparando de cara al futuro una nueva serie fotográfica “sobre los derechos de la mujer”, porque además de ser feminista también aboga “por la fotografía social, ya que es una forma de denunciar y reivindicar”.
La exposición fotográfica 'Detrás de la puerta' podrá visitarse desde el 17 al 21 de noviembre en la Casa de la Cultura de Orgaz, en la calle Beato Ruiz de los Paños, 9, los lunes, miércoles y viernes de 10:30 a 14:00 horas, y de lunes a viernes de 16:00 a 20:00 horas, el mismo horario de la Biblioteca.
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