La Junta retomará contactos la próxima semana para intentar desbloquear el presupuesto
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha avanzado su intención de retomar el contacto con los grupos parlamentarios de las Cortes de Castilla-La Mancha la próximas semana y reanudar así las negociaciones para intentar sacar adelante el Proyecto de Ley de Presupuestos para este año 2017 que no lograse sacar adelante por el sorpresivo voto en contra de Podemos y también por la negativa del PP en la Cámara regional.
Un anuncio que se produce tres días después de que tanto PSOE como Podemos y PP hayan concluido sus procesos internos de renovación de cargos, tanto a nivel nacional como regional.
Las conversaciones se retomarán, ha dicho, “en cuanto terminamos reuniones con colectivos sociales” -la Junta se planteó el objetivo de reunirse con unos 200 en toda la región tras el rechazo a las cuentas regionales en las Cortes- y después de lo que García-Page calificó de “varapalo” a las “expectativas y esperanzas” sobre un presupuesto “más avanzado”. La idea es trasladar a los grupos políticos el planteamiento de los distintos colectivos e intentar así el desbloqueo parlamentario del presupuesto.
“Si hay que discutir el presupuesto en agosto, se hace”
El presidente ha recordado que aunque no se puede hablar “puramente” de ecuador de legislatura, sí se cumplen ahora dos años de las Elecciones Autonómicas que, en su opinión, “dieron comienzo a una etapa de reconstrucción” para una región que “pasó las de Caín en la etapa anterior”.
Ha anunciado que el próximo mes de julio se producirán diversas comparecencias por parte del Gobierno regional para hacer balance de gestión y confió en que puedan coincidir en el tiempo, y también en las soluciones, con un nuevo debate presupuestario para el que se mostró dispuesto a quedarse sin vacaciones. “Si hay que discutir en agosto el presupuesto se hace. Estoy dispuesto a no tener vacaciones”.
Cree que el acuerdo “es posible” y apelaba a la “responsabilidad” de los grupos parlamentarios porque asegura que no renunciará a aprobar las cuentas regionales para este año. Será un presupuesto, añadía que refleje 300 millones de euros más destinados a empleo, sanidad, prestaciones sociales.
El presidente castellano-manchego cree que “no hay alternativa” y advierte que, de no salir adelante los presupuestos para la región, se considerará como “una forma de moción de censura encubierta o de tapadillo cuando estamos aquí para hacerle la vida fácil a la gente”.
Preguntado por si volverá a fiarse del secretario regional de Podemos José García Molina, el presidente regional dijo que aunque le gustaría sacar adelante los presupuestos por unanimidad lo ve “imposible” y advirtió que no va a permitir que se hable de las cuentas como si no hubiera habido un pacto. “Yo presenté un presupuesto pactado, ultimado y por consiguiente y ese es mi faro fundamental”.
Podemos condiciona su apoyo pero se sentará a hablar
El secretario general de Podemos en Castilla-La Mancha, José García Molina, ya ha respondido al anuncio del presidente regional, Emiliano García-Page. Ha dicho que “por supuesto” que se sentarán “a ver qué tiene que decir”, aunque le ha avisado de que si presenta las mismas cuentas regionales para 2017 la respuesta de Podemos “será la misma”, es decir, volverán a rechazarlas como ocurrió el 7 de abril.
El líder de Podemos en la región ha asegurado, en declaraciones a Europa Press, que el presidente autonómico no se ha puesto en contacto con la formación morada aún, algo que ha tildado de “al más puro estilo Page” pero ha apuntado que “le parece perfecto” que éste se ponga en contacto con los grupos parlamentarios.
“Que lo haga”, ha animado a García-Page, al tiempo que ha recordado que Podemos ya ha dicho “muchas veces” que “a negociar siempre” están dispuestos, aunque a que les digan lo que tienen que hacer y cómo lo tienen que hacer “no” porque “la directriz política y las decisiones de Podemos las tomamos en Podemos, no en el PSOE ni el presidente”.
Dicho esto, García Molina ha explicado que la condición que pone Podemos para aprobar los presupuestos son que “se cumplan las palabras firmadas y que se cumplan los acuerdos firmados” y si no se cumple “la hoja de ruta que nos habíamos trazado, con nosotros no van a poder contar”. “Si no puede o no quiere”, le dice a García-Page, “creo que tiene ahí a 16 diputados del PP para seguir haciendo las mismas cosas que se hicieron en el Ejecutivo anterior”, ha destacado.
“Los primeros presupuestos entendíamos que eran unos presupuestos que había que superar rápidamente, fuimos responsables e hicimos unos presupuestos que en buena medida superaban un primer obstáculo, que era superar la etapa Cospedal, pero ya dijimos que el segundo año íbamos a ser mucho más exigentes con los presupuestos a la hora de tener un modelo de región en la cabeza y cuál eran las apuestas”, ha recordado.
