La Diputación de Cuenca presume ahora de Segóbriga tras intentar abandonar su gestión

El Parque Arqueológico de Segóbriga, en Cuenca, ha cerrado el ejercicio 2016 con casi 50.000 visitantes, lo que supone un incremento del 1,2 por ciento con respecto al pasado año 2015. Son datos que ha facilitado el vicepresidente de la Diputación, Julián Huete, al realizar un “excelente” balance del año, no solo por la nueva subida en el número de visitantes, sino “porque consolidan el crecimiento de visitas que se viene experimentando desde que en 2013 la Diputación de Cuenca se hiciera cargo de la gestión del parque arqueológico”.

En ese periodo se ha registrado un aumento del 29,1 por ciento, al pasar de los 38.234 visitantes de hace cuatro años a los actuales 49.375. Huete considera que “estos resultados suponen todo un espaldarazo” a la gestión que la Diputación ha llevado a cabo en Segóbriga, lo que les anima “a continuar trabajando para no dejar de mejorar”.

Pero esta postura que hoy mantiene la Diputación conquense no fue así durante todo el año 2016. De hecho, y por sorpresa, en abril del pasado año la Institución provincial anunciaba su renuncia a la gestión del Parque, pocos meses después de la llegada del PSOE al Gobierno regional.

La Diputación alegó pérdidas pérdidas derivadas de asumir las competencias que se repitieron -sin problema entonces- durante los años de Gobierno de Dolores de Cospedal.

En 2013, bajo el gobierno popular, tanto en la Diputación como en la Junta, la gestión de Segóbriga supuso a la Diputación 42.000 euros de pérdidas, en 2014 fueron unos 90.000 euros, mientras que en 2015 fueron de apenas 5.000 euros, por lo que prácticamente se autofinanció. Precisamente éste asunto sobre quién debía pagar esas pérdidas – si Diputación como entidad gestora o la Junta, por tener la competencia en esta materia – ocuparon muchos titulares en la pasada legislatura.

El delegado de la Junta en Cuenca, Ángel Tomás Godoy, dijo al conocer la decisión de la Diputación provincial de abandonar la gestión del Parque Arqueológico de Segóbriga, que se trataba de una cuestión “política”, ya que el único cambio desde que en 2013 la Institución que preside Benjamín Prieto asumiera dicha gestión era “que Cospedal ya no es presidenta de Castilla-La Mancha”.

Tras dos meses de enfrentamientos con la Junta y tras renunciar a la gestión, el presidente de la institución provincial, Benjamín Prieto, cambio de opinión y asumió que se iba a seguir gestionando el parque hasta 2019. “Nos parece perfecto”, dijeron entonces desde la Junta tras mostrar su perplejidad porque se hubiera estado “mareando” la situación.

Ahora, la Diputación exhibe datos de visitantes al parque y alude a los 3.419 visitantes del último mes de 2016 aunque sus mejores meses fueron abril, marzo y mayo que concentraron el 43,54 por ciento de las visitas, llamando la atención que más de la mitad acudieron en grupo.