Sonorama, una década acercando las orillas del Atlántico desde el escenario Charco
El festival Sonorama Ribera (Aranda de Duero, Burgos) se irá a hacer las Américas en noviembre, a Uruguay, y en febrero de 2024, México, en unas nuevas ediciones de su festival programadas ya al otro lado del Atlántico.
Pero la relación entre ambas orillas del océano viene de más atrás, desde hace una década, cuando los promotores del evento arandino crearon el escenario Charco, en el parque de la Isla de la capital ribereña, que se ha convertido en un espacio de referencia para los artistas latinoamericanos.
“Nació con la idea de descongestionar la plaza del Trigo y La Sal y no hay más que ver que se ha conseguido. Es además un punto de encuentro de grupos de ambos lados del Charco, como su propio nombre indica. Y es muchísima la gente que viene porque se tiene sombra, césped y disfrutan de la música de auténticos grupazos”, relata Antonio José, 'Jacho', responsable este año de esta zona de conciertos.
Cada jornada sonorámica, entre 6.000 y 7.000 personas se dan cita a orillas del río Arandilla para disfrutar de la música de grupos que han cruzado el charco, pero también de formaciones nacionales que se alternan con las iberoamericanas.
Ellos son los encargados de lanzar al ambiente ritmos de todo tipo aunque, también es verdad, predominan los más cálidos y bailables propios de aquellas tierras.
En total, cada Sonorama, una veintena de formaciones llena de música este rincón de la capital ribereña. Una parte muy importante no son demasiado conocidos por el gran público, aunque otros llegan avalados por reconocidas trayectorias, como 'el Langui' que mañana actúa a las 16:00 horas, o El niño de la hipoteca, que hará lo propio a mediodía.
Además, nadie se olvida de que por ese lugar pasó, antes de conseguir la relevancia internacional actual, Naty Peluso.
Yoel Hernández, Zetak, Safree o J. Güero han dejado constancia de su buen hacer en el parque de la Isla. Una experiencia más que positiva, reconoce María de Juan, una granadina residente en Murcia que la mañana del viernes por fin ha podido ofrecer su concierto después de llevar programada en Sonorama desde 2020.
“Estamos encantados de haber podido actuar rodeados de naturaleza, con un público superatento, junto a artistas de Latinoamérica y se está creando una unión muy bonita de músicos que cantamos en español. Se respira un ambiente muy bueno”, subraya María, emocionada aún tras haber recibido el típico grito de 'Escenario principal' tras su actuación.
Muchos de ellos, confían en que en las citas en Uruguay y México también tendrán su oportunidad para poder demostrar su arte más allá del Atlántico.
Mientras el ambiente más tranquilo y sabrosón se ha disfrutado en el parque de la Isla, los amantes de lo clásico, aquellos que quieren vivir la experiencia y el frenesí de la plaza del Trigo no han faltado a su cita.
Desde el mediodía han bailado y coreado con Alejo, Dani y Franvii hasta que, con puntualidad británica, a las tres de la tarde, el director del festival, Javier Ajenjo, ha aparecido en las tablas, les ha instado a consumir productos de la tierra y les ha dejado con el grupo sorpresa. “Un grupo que ya es una familia. Para bailar, saltar y disfrutar, Ladilla Rusa”.
Su potente directo, sus histriónicas letras y sus extravagantes temas han hecho las delicias de los miles de asistentes, que han visto como uno a uno iban interpretando todos sus éxitos. Arrancando con 'Macauly Culkin', siguiendo con 'Qué ladilla', 'Bebo' un mix con el 'Diva' de Dana International o 'Duro de Pelar' de Rebeca para cerrar con su imperdible 'Kitt y los coches del pasado'.
Y después... a recuperar fuerzas para una sesión vespertina que reúne a Las Ginebras, Jorge Drexler, Viva Suecia, Vetusta Morla y Sidonie entre otros.
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