Un excargo de la Diputación de Valladolid admite al fiscal pagos no autorizados por 6 millones en una estación de esquí
El proyecto fallido de una pista de esquí seco en Villavieja del Cerro, una pedanía de Tordesillas (Valladolid) será investigado por un juzgado. La Diputación de Valladolid presentó un proyecto de 4 millones de euros, pagó 12, había comprometido 20 y hoy por hoy, la pista no existe. Desde su inicio estaba condenada, se construyó sobre un monte quemado. La constructora elegida por la Diputación fue Isolux Corsán y el contrato se firmó en 2006.
Pero, sobre la Diputación de Valladolid (PP) no pesa únicamente el despilfarro de una decena de millones de euros por haberse saltado la Ley de Montes -en las Cortes de Castilla y León se llegó a aprobar una ad-hoc para evitar su ilegalización- sino presuntos delitos como prevaricación, falsedad documental y malversación de caudales públicos. Tras una comisión de investigación en la institución provincial, los grupos de la oposición acabaron presentando una denuncia en la Fiscalía provincial. Del Ministerio Fiscal, que ha apreciado indicios de delito, el asunto ha pasado al decanato de los juzgados para que se remita a un juzgado de Instrucción que investigue los hechos.
La denuncia de los grupos políticos era conocida, pero no la de un ex alto cargo del Partido Popular en la Diputación a la que ha tenido acceso eldiario.es. El exdiputado provincial y exvicepresidente de Sodeva (Sociedad Provincial de Desarrollo de Valladolid), Pedro Pariente, también se dirigió a la Fiscalía en agosto de 2018, con motivo de esa primera denuncia de la oposición, a través de un contundente escrito. “Puesto que conozco algunos hechos que entiendo que son relevantes, considero mi obligación ponerlos en su conocimiento”, anuncia. Pariente recuerda que se incorporó a la sociedad pública en 2007, tras el cese del anterior vicepresidente y del gerente y pocos días antes de que un juzgado paralizase las obras cautelarmente tras la denuncia de Ecologistas en Acción.
“Una de las primeras cosas que se me requirió fue la conformidad con la certificación de obras presentada por la empresa Corsán”, recuerda. Esa primera certificación ya tenía el visto bueno de dos técnicos de Sodeva. Pero, una vez firmada, cuenta Pariente, se le indicó que había que pagar “otras obras que estaban hechas además de las que aparecían en la certificación” y por valor de 2,9 millones de euros con IVA. Esos trabajos aparecían reflejados en un escrito del director de obra fechado pocos días antes.
El exvicepresidente relata que en ese momento pensó que eran obras aprobadas por el Consejo de Sodeva en noviembre de 2006 puesto que en un acta constan unas obras por el mismo importe “pero sin iva”. “Pregunté si con eso se quedaba todo liquidado pero ante mi sorpresa, me dijeron que había que sumarlas”, recuerda. Así, había que pagar unas obras ya hechas de 2,9 millones con iva y otras también realizadas de 2,9 sin iva “sin que ninguna de ellas figurase en un proyecto de obras”. Pariente explica además que como su cometido era conformar esas obras pero no tenía soporte documental para ello, exigió que se comprobase la “veracidad” de los trabajos, que se incluyeran en el proyecto refundido y se aprobase en el consejo de Sodeva, en el que estaban presentes funcionarios de la Diputación.
En una conversación con eldiario.es, Pedro Pariente precisa ahora que hasta el momento no ha sabido nada de lo que el considera una “aclaración” a la Fiscalía y que no se le ha llamado en ningún momento. “Si me llaman, iré y contaré lo que haya que contar. Con ese escrito he cumplido con mi deber. Ya expliqué todo en la comisión de investigación”, recordó. Fue en una comparecencia en esa comisión dónde Pariente descargó toda la responsabilidad del proyecto en el vicepresidente de la Diputación y presidente de Sodeva, Alfonso Centeno, al que se refirió como “el faraón” por las órdenes que daba y los cambios que sufría el proyecto inicial.
Pariente también comenta a eldiario.es que sus reticencias para asumir ciertas órdenes le pasaron factura. “A mí todo eso me costó el puesto en Sodeva y en la Diputación, acabé cuando acabó esa legislatura”, asegura. Además, a preguntas de este periódico, Pariente añadió que no había informado a su partido del escrito que presentó a Fiscalía y que hasta el momento no ha recibido ninguna llamada del PP. “Por prudencia, ya que va a comenzar una investigación judicial, no puedo contar mucho”, se disculpa.
El “faraón” al que se refiere Pariente, Alfonso Centeno, ha sido durante años el hombre fuerte del Partido Popular en la provincia. Su estrecha relación con Corsán se demostró cuando salieron a la luz unos correos electrónicos de la constructora en los que hablaba del pago de un viaje a Japón a Centeno y a su mujer junto a directivos de la compañía, todo ello en plena gestión del proyecto. Aunque el Tribunal Superior de Justicia investigó los hechos, determinó, tras presentar Centeno unas órdenes de pago de Viajes El Corte Inglés, que sufragó los pasajes, de algo más de 11.000 euros.
Ni Centeno, ni el Partido Popular explicaron qué objetivo tenía el primero realizando un viaje de ocio privado con adjudicatarios de un proyecto millonario. Centeno, sigue estando al frente del Ayuntamiento de Olmedo, pero se le sacó de la lista a las Cortes de Castilla y León en las últimas elecciones.
