La Junta de Castilla y León afirma que gestiona con “celeridad” ante una mamografía sospechosa

El portavoz de la Junta de Castilla y León, Carlos Fernández Carriedo, asegura que el sistema de sanidad público de la Comunidad actúa “con la mayor celeridad posible” cuando hay un resultado sospechoso en una mamografía, si bien no disponen de los datos sobre cuánto tiempo pasa hasta que se comunica ese resultado y se hace una segunda prueba que confirme o descarte un tumor.

Fernández Carriedo ha insistido, en la rueda de prensa posterior al Consejo de Gobierno, en que “los médicos actúan con muchísima celeridad”, derivando los casos de mamografías con resultado sospecho a una segunda prueba y, de ahí, cuando se detecta la presencia de un tumor al tratamiento que corresponde.

Sin embargo, fuentes de la Consejería de Sanidad han reconocido que no disponen de los datos sobre cuánto tiempo se tarda en comunicar esa sospecha y en citar a las mujeres a una segunda prueba, ni si existe lista de espera para ese trámite.

Si han indicado que, ante la petición realizada por el Ministerio de Sanidad y tras lo ocurrido en Andalucía con el retraso en la comunicación -y realización de nuevas pruebas- a casos sospechosos, extrapolarán todos esos datos y los remitirán a Sanidad.

A preguntas de los periodistas, el portavoz ha destacado que la Junta dispone de información pública sobre los cribados de cáncer de mama, el número de mamografías que se realizan anualmente y, de ellas, cuáles dan un resultado sospechoso que se acaba confirmando.

Son datos todos ellos desglosados por provincias, y que se pueden consultar a través del servicio de Datos Abiertos de Castilla y León, y de los informes anuales de los Programas de Prevención de Salud Pública, también colgados en la web de la Administración autonómica.

“No tenemos inconveniente alguno en remitirlos al Ministerio, si los quiere, los necesita o los va a utilizar”, ha aseverado, insistiendo en que la Junta hace ya ese tratamiento de los datos del cribado de cáncer de mama, y también de cérvix o colon, que los que Sanidad va a solicitar a las comunidades autónomas.

Los datos del informe anual de 2024 en Castilla y León, consultados por EFE, muestran que se realizaron 143.463 mamografías, de las cuales, 9.199 dieron resultado sospechoso positivo (un 6,4 %) y las pacientes se derivaron a una segunda prueba para un diagnóstico final de confirmación o descarte.

También en los informes trimestrales de listas de espera, en el del 30 de junio -el último-, se recoge que había 445 pacientes esperando por una mamografía, y que la espera media es de 44 días; sin embargo, no hay referencia específica a segundas pruebas ante sospechas en los resultados de los cribados.