CaixaBank gana 970 millones hasta septiembre, un 2,6 % menos, por el impacto de Barclays
CaixaBank obtuvo un beneficio neto de 970 millones de euros en los nueve primeros meses del año, un 2,6 % menos que en el mismo período del año anterior, debido al efecto fiscal positivo que tuvo la integración de Barclays en 2015. El consejero delegado de la entidad, Gonzalo Gortázar, ha destacado que los resultados de la entidad se dan en un “entorno complicado” de tipos de interés a cero o en negativo. Asimismo, ha mostrado su satisfacción por la futura formación de un Gobierno y ha pedido que a lo largo de la legislatura se den “acuerdos y concesiones para que las cosas puedan funcionar correctamente”.
Según la información que la entidad ha remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), CaixaBank ha reducido las provisiones un 33,3% hasta 1.177 millones. Por otro lado, el resultado antes de impuestos alcanzó los 1.314 millones, un 45,2 % más que en 2015, y el resultado atribuido al negocio bancario y de seguros, excluyendo la actividad inmobiliaria y las participadas, ascendió a 1.374 millones.
En el actual contexto de tipos de interés en mínimos y de volatilidad de los mercados, el margen de intereses de CaixaBank cayó un 6,9 %, hasta 3.080 millones de euros, mientras que el bruto disminuyó un 6,6 %, a 5.939 millones. Por su parte, el margen de explotación creció un 2,7 %, hasta 2.821 millones.
Respecto a la decisión del Frob de fusionar Bankia y BMN, Gortázar ha constatado que el Frob “tiene todo el derecho a analizar su cartera de participaciones y ver si alguna combinación incrementa el valor”. Gortázar ha explicado que CaixaBank está enfocada en la operación sobre BPI, cuya OPA espera poder cerrar antes de que acabe el año. “Y a eso nos vamos a dedicar”, ha zanjado. Gortázar también ha valorado que las posibles fusiones bancarias en España “se producirán por motivos económicos y no políticos”, en referencia al futuro Gobierno, y ha añadido que el plan de CaixaBank no contempla, por ahora, más operaciones corporativas.
En cuanto a los gastos de explotación recurrentes, bajaron un 2,2 % hasta septiembre, con 2.997 millones, gracias a la contención de costes, pese a que en este último trimestre la entidad registró 121 millones de costes extraordinarios asociados al plan de salidas voluntarias pactado con los sindicatos el pasado verano. Desde el año 2011, la entidad ha reducido su base de costes un 18%. Cuenta con un 21% menos de empleados y un 30% menos de oficinas que en 2011. Pese a ello, CaixaBank tiene un 29% más de clientes y un 30% más de negocio que hace cinco años.
La ratio de morosidad de CaixaBank siguió disminuyendo y se situó en el 7,1 %, casi un punto porcentual menos que hace un año, por la caída de los saldos dudosos, que quedaron en un 20,6 % en variación interanual, hasta los 15.199 millones.
