Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

La batalla política (de los nombres) de las calles valencianas

Placa de la Avenida Alcalde Eduardo Zaplana Hernández-Soro en Benidorm.

Toni Cuquerella

0

La retirada del nombre del escritor y lingüista Enric Valor de una avenida en Mutxamel ha sido el último capítulo de la batalla soterrada en los callejeros de localidades valencianas. Valor, un referente de la cultura valenciana, no ha sido el primero en vérselas en este brete. Recientemente también estuvieron en el debate de las calles Joan Fuster, en otros casos el término País Valencià y también políticos bajo sospecha de corrupción.

La mayoría de estas situaciones han venido provocadas por propuestas que surgían desde la derecha. Así en Mutxamel, el gobierno de PP y Cs, de quien partió la propuesta, quiso quitar hierro al asunto otorgando el nombre del escritor de Castalla a una calle secundaria, mientras que Vox, que también apoyaba la retirada, defendía la acción contra un lingüista “nacionalista valenciano catalán”.

Recientemente también se produjo una polémica en Massamagrell donde Vox desde la oposición impulsó una propuesta para retirar el nombre del escritor y ensayista Joan Fuster, tildándolo de “traidor”. Una propuesta que en principio salió adelante con el apoyo de PP y Ciudadanos, pero también porque el gobierno municipal del PSPV se puso de perfil. Ante la polémica que se formó desde la izquierda al final los socialistas tuvieron que dar marcha atrás y reponer el nombre del escritor de Sueca.

Desde la izquierda también recientemente se ha producido la retirada de nombres en las calles como las dedicadas al rey emérito Juan Carlos I, por los recientes casos destapados de posible corrupción del monarca. Es el caso de dos municipios, Sagunt, donde la plaza que llevaba su nombre ha pasado a tener el nombre del médico y político republicano Peset Aleixandre, y en Pedreguer, donde se ha retirado el nombre a la avenida dedicada al monarca para que se llamara del País Valencià. En ambos casos la propuesta nacía desde las filas de la izquierda, mientras que la aprobación se produjo entre discrepancias de la derecha.

Precisamente este último nombre dado a una vía, el País Valencià, ha sido un nombre contra el que históricamente se movieron gobiernos municipales del PP, aunque con distintos resultados. Así, mientras en Torrent en 2009 se retiró el nombre estando en la alcaldía la actual portavoz del PP en el Ayuntamiento de València, María José Catalá, en ciudades como Algemesí o Xàtiva, también con gobiernos del PP, el intento no cristalizó en 2012; en el caso de Xàtiva, Alfonso Rus propuso un trato a la oposición: retirar los honores de la ciudad a Franco a cambio de retirar el nombre de la Plaça del País Valencià, la oposición lo rechazó y cuando pasó a gobernar se limitó a retirar la medalla al dictador. Más recientemente hubo otro intento en Orihuela para quitar el nombre de la avenida del País Valencià en 2020 con una propuesta de Vox, pero incluso el PP se opuso a este cambio alegando que era un nombre histórico en la localidad.

Otro fracaso en el cambio de un nombre fue el de la avenida de Eduardo Zaplana en Benidorm, donde la izquierda ha pedido en reiteradas ocasiones la retirada del nombre del exalcalde y también expresidente de la Generalitat y exministro del PP. No obstante, en todo momento el silencio ha sido la respuesta que ha mantenido el nombre del homenaje a Zaplana pese a sus causas judiciales por corrupción.

Una situación similar se produjo con la calle dedicada a Alfonso Rus por el gobierno del PP en Cerdà, a finales de la legislatura de 2015, que acabó tanto con el mandato del entonces gobierno local como del expresidente de la Diputación de València y exalcalde de Xàtiva, también del PP. Pero la calle no esperó a ser rebautizada por voluntad del gobierno de turno, y a los pocos días de ser inaugurada por el propio Rus, algún vecino de la localidad le puso el nombre de “Carrer dels 2 milions de peles”, en referencia a las grabaciones sobre supuestos cobros de comisiones del político, también investigado por corrupción.

Homenajes callejeros

Más allá de los nombres de las calles también hay homenajes en los espacios públicos a personajes o fechas emblemáticas que han sido el objetivo de gobiernos de la derecha.

Es el caso de Gandia, donde el gobierno del PP retiró en 2014 retiró la escultura en memoria de la Batalla de Almansa del 25 de Abril de 1707. Los argumentos utilizados por el gobierno municipal conservador de entonces fueron que se trataba de una escultura “catalanista”, que “afeaba” la entrada de la ciudad, e incluso afirmó el propio exalcalde popular Arturo Torró que “los madrileños que vienen a la ciudad no la entienden”. La escultura fue trasladada a otro parque donde todavía permanece, e incluso el propio artista que la creó, el escultor alcoyano Antoni Miró, recuerda que el homenaje fue concebido para la plaza de la que se arrancó.

En Elx el caso que fue politizado fue el de Dolores Ibárruri 'la Pasionaria' a quien la ciudad había dedicado un monolito en un parque. Pero este homenaje fue retirado en 2011 con el primer (y único) gobierno municipal del PP. En este caso sí hubo respuesta política con el cambio de gobierno, y cuando la izquierda volvió a tener la alcaldía repuso el monumento en 2017.

Etiquetas
stats