El Gobierno transfiere 1.000 millones de euros a la Generalitat Valenciana
El Gobierno central va a transferir este martes a la Generalitat un total de 1.186 millones de euros, correspondientes a la liquidación de 2017 menos los anticipos a cuenta.
Así lo ha anunciado el delegado del Gobierno en la Comunitat Valenciana, Juan Carlos Moragues, quien ha afirmado que ese importe supone el 1,1 % del PIB valenciano y que equivale “a 296 colegios o 36 hospitales ”.
Moragues ha presentado en una rueda de prensa un balance de la acción del Gobierno central en la Comunitat Valenciana en su primer año de legislatura.
El delegado ha destacado que entre 2015 y 2017, la mejora de la financiación directa a caja ha aumentado 2.014 millones (2 % del PIB) y que los proveedores de la Generalitat han cobrado del Estado, a través del FLA, 349 millones, el 97,72 % para Sanidad, y ha precisado que el Estado asume los intereses de las cargas financieras del Gobierno valenciano.
Moragues ha resaltado que se han finalizado obras de infraestructuras por importe de más de 240 millones y se han cumplido “compromisos” del Corredor Mediterráneo, el Parque Central y la línea ferroviaria Sagunto-Teruel-Zaragoza.
Un dinero retenido dos años en Madrid
El dinero que ha llegado este martes a la Comunidad Valenciana es el de la liquidación de 2015 que el Gobierno ha retenido durante 2 años. El conseller de Haienda, Vicent Soler, ha explicado que el Gobierno ha ahogado a la Comunitat Valenciana enviando “rácanamente” los anticipos de un dinero (la liquidación de 2015) que es de los valencianos y negando el FLA extraordinario.
Hasta ahora, siempre según la Generalitat, sólo había transferido 494 millones entre anticipos y FLA extraordinario, mientras que en 2016 había enviado a estas alturas 1.943 millones (entre anticipos y FLA extra) y en 2015 transfirió 2.646 millones (igualmente, entre ambos conceptos). O sea, en 2015 había enviado (antes de las elecciones) cinco veces más dinero.
La Generalitat también lamenta que el gobierno negó hace pocas semanas un anticipo de 110 millones de euros a cuenta de la liquidación de 2015 para pagar a los proveedores.