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El conseller de Hacienda (en el centro de la imagen), acompañado de los directores generales valencianos encargados de la gestión de los fondos europeos.

Laura Martínez

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El Gobierno valenciano insiste en reclamar una descentralización de los fondos europeos y que el Ejecutivo central ceda parte del mando a las comunidades autónomas. En la reunión sectorial de Hacienda de este lunes, el conseller Vicent Soler insistía en la línea avanzada por el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, en la Conferencia de Presidentes, donde el dirigente socialista reclamó la cogestión de algunos proyectos para sectores singulares.

“La estructura productiva de España es variada territorialmente, por eso nos gustaría concretar que una parte de los fondos dirigidos a la industria vayan enfocados a proyectos que inciden directamente en las estructuras productivas de cada territorio”, reclamaba Soler. El conseller de Hacienda se refería a sectores como la cerámica, el textil o el calzado, que han resistido a la crisis sanitaria -algunos por su reconversión- y que participan en estrategias para su transformación a un modelo más sostenible -como en el caso de la Estrategia del Hidrógeno Verde-, pero también al grueso del tejido empresarial valenciano, las pymes, al que preocupa quedar fuera de las ayudas.

El Instituto Nacional de Estadística apunta que solo el 4,5% de las empresas españolas tiene más de 20 trabajadores. Dicho de otra forma: más de 3,3 de millones de empresas españolas tiene menos de 20 trabajadores. El tejido empresarial patrio se compone en un 99% de pequeñas y medianas empresas, cifra equivalente en la Comunitat Valenciana. La mayoría de estas empresas apenas disponen de los recursos necesarios para optar a los llamados proyectos tractores o PERTE (Proyectos Estratégicos para la Recuperación y Transformación Económica), uno de los mecanismos de los fondos europeos de recuperación, que concentran buena parte de la financiación.

El conseller de Hacienda ha insistido durante el encuentro con sus homólogos y la ministra en “que se produzca un reparto territorializado de los fondos europeos para para que lleguen también a los pequeños municipios, de forma que estos no tengan que competir con otras entidades de más volumen”. “La estructura municipal es muy diferente por comunidades autónomas. Las corporaciones locales son las administraciones más próximas a los ciudadanos y, por tanto, a los negocios y a las empresas, y los ayuntamientos más pequeños deben ser tenidos en cuenta”, ha apuntado Soler. Asimismo, el conseller también ha solicitado que se valore en el diseño de las ayudas el tema de la despoblación y de la congestión demográfica, “dos fenómenos demográficos y sociales que se dan en la Comunitat Valenciana”.

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