El Tribunal Supremo confirma el despido de la directiva de la EMT de Valencia implicada en la estafa de cuatro millones

La Sala de lo Social del Tribunal Supremo (TS) ha inadmitido el recurso de casación de la exdirectiva de la Empresa Municipal de Transportes (EMT) de Valencia Celia Zafra contra la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJ-CV) que declaró procedente su despido a consecuencia de la estafa de cuatro millones de euros que sufrió la mercantil pública mediante el denominado fraude del CEO. El auto del TS, al que ha tenido acceso elDiario.es, considera que Zafra “debió tener un comportamiento más sigiloso y no haber dado crédito a la operación financiera sin tan siquiera realizar antes unas mínimas comprobaciones con sus superiores jerárquicos”.

El TSJ-CV declaró procedente el despido de la directiva de la EMT de Valencia, que “remitió a los estafadores documentos de la empresa con los que dio acceso a las firmas de los apoderados de la sociedad, facilitando de este modo su falsificación”. La sentencia consideraba que, ostentando el cargo de directiva de Administración, Celia Zafra “dispuso hasta en ocho ocasiones de fondos de una cuenta corriente abierta en Caixabank con destino a una cuenta de un banco de China en Hong Kong, a favor de dos compañías extranjeras desconocidas para la empresa, con uso fraudulento de las firmas de dos apoderados de la entidad, con suplantación de personas y direcciones de correo electrónico”.

La operación, agrega, tenía como finalidad una “inexplicable adquisición de una empresa en China por una empresa pública española” sin que la directiva despedida informara “en ningún momento acerca de dichas transferencias a sus superiores” ni empleara la “diligencia mínima exigible” con un importe total defraudado superior a los cuatro millones de euros. 

La resolución del alto tribunal autonómico destacaba que Celia Zafra, a tenor de su puesto de directiva, “no debió dar crédito a la operación financiera sin tan siquiera realizar antes unas mínimas comprobaciones con sus superiores jerárquicos”.

En su recurso ante el TS, la defensa de Zafra se escudaba en una sentencia de la sección primera de la Sala de lo Social del TSJ de Madrid que declaró improcedente el despido de una trabajadora del Grupo Ilunión que sufrió un fraude del CEO a manos de los mismos estafadores. Sin embargo, el TS sostiene que “concurre un elemento diferenciador” entre ambos casos: Celia Zafra “tenía un puesto de responsabilidad en la empresa” por lo que debió de mostrar un “comportamiento más sigiloso”. 

La resolución, contra la que no cabe recurso alguno, declara firme la sentencia del TSJ-CV que confirmaba el despido de la exdirectiva de la empresa pública.