¿Qué tiene que tener un hotel para ser un 7 estrellas?
¿Existen los hoteles de 7 estrellas o son un mito del marketing? Los siguientes detalles demuestran que sí hay una categoría superior a las 5 estrellas.
El mercado del lujo siempre está en auge porque quien tiene dinero siempre exige más variedad y exclusividad. Así es como los 5 estrellas se quedan cortos y empiezan a añadir mayores estándares de calidad y servicios inimaginables para cualquier turista medio. Pero lo cierto es que, según Alberto Calcerrada, portavoz de trivago, “hay hoteles que se autodenominan de 7 estrellas, pero no hay en ningún país una regulación para ello ya que normalmente llegan sólo a cinco estrellas y excepcionalmente a 5 estrellas gran lujo. En España hay una normativa diferente por cada comunidad autónoma”
1. Excentricidades de lujo
Los hoteles de 7 estrellas vienen a responder a las demandas de personajes con gran poder adquisitivo y celebridades de todo el mundo, cuyas excentricidades han hecho sudar tinta a más de un director de hotel empeñado en satisfacerlas. Un ejemplo es el Burj Al Arab, en Dubai, un rascacielos de 321 metros de altura con 202 suites.
Por ejemplo, el Six Senses Zighy de Oman te lleva hasta sus puertas en parapente y el Belmond Villa San Michele, en Fiesole (Florencia) te da un paseo en globo por la capital cultural de la Toscana. En otros hoteles podrás cenar frente a un cielo estrellado en un observatorio, como en el Four Seasons Costa Rica, o bien contar con un completo estudio de maquillaje en la habitación y los servicios de un maquillador profesional, como ocurre en el Gansevoot Meatpacking de Nueva York.
2. Transporte privado por todo lo alto
Otro servicio de los hoteles que podría decirse propio de las 7 estrellas es el transporte privado en limusina con chófer, como ofrece el Town House Galleria, en Milán, situadoencima de la tienda de Prada de la Galería Vittorio Emanuele. Sus suites son aproximadamente el doble (o el triple) del piso de cualquier pareja española y cuestan entre 700 y 10.000 euros. El ya mencionado Burj Al Arab de Dubai tiene incluso su propia flota de Rolls Royce.
3. Cuanto más privado y menos masificado el recinto, mejor
4. El bienestar es lo primero
5. Gastronomía de infarto sin salir del hotel
No todas las comunidades españolas exigen que un hotel tenga restaurante para ser considerado cinco estrellas gran lujo. Sin embargo, los autodenominados hoteles de 7 estrellas disponen de varios restaurantes para que sus huéspedes puedan elegir entre diferentes opciones gastronómicas sin salir del hotel. El hotel Pangu Plaza, en Beijing, cuenta con el que aseguran que es el restaurante japonés más lujoso del mundo.
6. Amor por lo exótico
7. Glamping: poder disfrutar de la naturaleza sin incordios