Los mejores moldes para hacer nuestros propios helados en casa
A la mayoría de nosotros nos encantan los helados, más aún con esta ola de calor que asola el país. Pero aunque salir a comprar uno hasta la heladería más cercana es, casi, una tradición para muchos, las temperaturas sofocantes hacen que esta no sea la mejor de las ideas. Una alternativa es hacer nuestro propio polo desde el hogar, a nuestro gusto, con moldes para helados.
A pesar de que seguramente no nos salgan igual que los gelatos, esta es una opción para hacer un tentempié fresco, más saludable y con los ingredientes que queramos o que tengamos a mano. Y es que, en realidad, no necesitamos casi nada para hacer un helado: tan solo una trituradora o batidora donde mezclar los ingredientes y, de ahí, al congelador.
Para los más puristas o los que tenemos peques en casa, esto se puede quedar corto, ya que obtendremos una masa congelada. Una manera de hacer que nuestros helados sean más parecidos a los de las heladerías es hacerlos en moldes de silicona. Si necesitas refrescarte, en ConsumoClaro te recomendamos algunos moldes para hacer helados.
Moldes de silicona para 8 helados
Este modelo es sencillo, pero efectivo. Cuenta con 8 moldes y 100 palillos de madera para imitar los clásicos helados que solemos comer desde pequeños. Según el fabricante, se trata de un material antiadherente y que es “fácil de limpiar”, por lo que puede ser una gran solución para los días de más calor.
Si 8 nos parecen demasiados helados, entonces este alternativa de 4 moldes puede ser ideal para nosotros. Con un palo de plástico para cada molde, este pack cuenta con cuatro modelos de diferentes colores de 10 centímetros de altura. Ideal para hacer deliciosos polos y tener un buen surtido para el día.
¿Y si buscamos imitar las formas de los helados más famosos? Este pack de Lékúe nos ofrece cuatro moldes de helado que dan el resultado de los archiconocidos Frigopié, un lápiz, un cohete o una espiral como los Calippo. Esto nos ayudará a contentar a los más pequeños de la casa... y no tan pequeños.
Además, son de mayor tamaño que los helados anteriores, por lo que nos saciarán aún más y, como extra, se puede meter en el lavavajillas sin problemas.
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