“El trap es una nueva ola como en su momento lo fue el punk”
El Último Vecino parece que se quedó atrapado en una película de mediados de los 80. Son retro, como el tocadiscos de tu abuela. Son vintage como la ropa de las tiendas de Malasaña. Y son pop, precisamente como todo lo que pegaba fuerte en aquella Movida Madrileña que tuvo por bandera a Radio Futura, Alaska y los Pegamoides, El Último de la Fila o Nacha Pop, entre otros cientos de grupos.
Gerard Alegre hace un pop electrónico difícilmente catalogable. A veces recuerda a New Order, otras (la mayoría) a The Smiths. Debutaron en 2013 con un LP, El último vecino, que lanzaron en casete y vinilo. Las 100 cintas se acabaron en seguida. Los 500 vinilos tardaron un poco más en volar, pero también lo hicieron. Y luego volaron ellos: México, EEUU, Berlín o Lituania les vieron crecer, hasta que el año pasado sacaron su segundo disco: Voces.
El álbum fue un éxito y El Último Vecino se ha encargado de promocionarlo por toda España hasta hoy, como quien dice. Este martes el grupo actúa en la Sala El Sol de Madrid después de hacerlo en Barcelona hace justo un mes. Luego se irán de gira por América Latina. “La idea es sacar un single antes de verano”, confiesa Alegre al otro lado del teléfono. Está nervioso porque espera que en el bolo de Madrid “pase lo mismo que pasó en Barcelona, que estuvo 'superpetado' y donde la gente lo pasó muy bien”.
Alegre es la voz y la producción de cada tema, algo que de haber sido de otra forma quizá no le hubiera permitido grabar la cover que está dando la vuelta a la escena más independiente de nuestro país. Mi chulo, el tema de La Zowi versionado por El Último Vecino, va camino de convertirse en uno de sus vídeos más vistos en YouTube: “Es algo así como la canción más triste del mundo”, dice Alegre, que no esconde que lleve un tiempo “tonteando con el trap”.
El trap es el nuevo pop
“Ese tema lo escuché hacía un tiempo, en un momento que estaba muy triste. Me habían pasado cosas a nivel personal y acabó convirtiéndose en una especie de obsesión para mí”, explica el líder de la banda. De momento, La Zowi no ha dicho nada, ni si le parece bien o mal que Alegre reinterprete su tema, que lleva más de 350.000 visitas en YouTube. “No tenía más narices que hacerlo”, dice.
“Me gusta el trap. Es una nueva ola como en su momento lo fue el punk”, continúa Alegre, que considera al género musical como “el pop más actual que hay”. Sin embargo, el artista no nos da nombres de sus referentes, ya que él siempre ha preferido la calidad a la cantidad. “Siempre he sido de escuchar los mismos grupos y las mismas canciones muchas veces. No me atrevería a aconsejar”, dice.
A El Último Vecino se le escapa el sonido de The Smiths por una rendija. Aunque Alegre niega idolatrarles, sí que admira “sus guitarras”. Las mismas que también encuentra “en Héroes del Silencio”. Es más de Johnny Marr que de Morrissey y de un arpegio antes que de un falsetto. Hasta el Some girls are bigger than others de The Smiths aparece en la cover de Mi chulo: “La habré escuchado como un millón de veces, y a veces sale”.
“El Último Vecino ha dejado de existir”
Hace algo más de diez días, el grupo metió el miedo en el cuerpo a todos sus fans al publicar en Facebook e Instagram una frase un tanto ambigua: “El mundo va demasiado rápido y la música es un suplicio. El Último Vecino ha dejado de existir”, dijeron. Al instante, una legión de gente inundaba los comentarios desconcertada por el repentino “adiós” de la banda. Pero nada más lejos.
“En ningún momento pretendía decir que nos disolvíamos como grupo o que dejaba de hacer música. Pero sí que es verdad que luego me di cuenta de que se podía intuir eso”, explica Alegre. Poco después tuvo que emitir una rectificación negando que fueran a desaparecer, algo que desembocó en una corriente de apoyo brutal hacia el grupo: “Pero bueno, tampoco toda esa gente que te escribe para dar ánimos sabe cómo estás en ese momento”, dice de forma un tanto lúgubre.
No han sido buenos tiempos para El Último Vecino, cuyo disco, Voces, tardó más de lo necesario en ver la luz. Según cuenta Alegre, la oscuridad no ha abandonado el túnel: “Ahora mismo estoy todavía pasando por un momento un poco depresivo y malo a nivel creativo, bastante nulo. Perder la inspiración me hizo decir que el grupo había dejado de existir”.
Planean nuevo single para antes de verano y nuevo disco para después del periodo estival. Y es que es difícil lidiar contra una personalidad depresiva: “Antes lo intentaba esconder pero ahora ya me da igual”, sentencia Alegre como quien tira una piedra al mar.