Unión de profesionales para conseguir una información mejor
Una sociedad bien informada es una sociedad más libre y mejor. Este es un lugar común con poca discusión. Pero una vez sentada esta base tan general ¿cómo se consigue? Las tecnologías actuales permiten un flujo y una cantidad de información abrumadores. Tanta que el exceso puede convertirse en desinformación, fácil intoxicación. En este contexto, la labor de los profesionales de la comunicación adquiere gran relevancia. Justo en este momento es cuando la profesión se ha visto más debilitada (paro, precariedad, economía sumergida, falsos autónomos...)
El 15 de diciembre de 2012 nació en Sevilla Se Buscan Perdiodistas- Comunicadores Asociados. El 9 de abril hizo su presentación en Madrid. Como un vivero de emprendimientos en el ámbito de la comunicación social, SBP se creó para “impulsar una estrategia de amplio espectro para recuperar el prestigio y la credibilidad, poner en marcha instrumentos concretos y útiles para mejorar las condiciones de trabajo en el sector e incentivar la creación de nuevos medios de comunicación en los que el periodismo honesto sea el núcleo central de su propuesta a la sociedad”.
El proyecto está conformado por “profesionales de todos los perfiles”, explican. Esto incluye periodistas, fotoperiodistas, operadores de cámara, diseñadores y técnicos. El primer paso que han dado es conformar una cooperativa de impulso empresarial. Es decir, una herramienta para sacar adelante ideas y emprendimientos. Para esto proponen que “los socios puedan cotizar en el régimen general de la Seguridad Social por el tiempo real de trabajo, en lugar de todo el mes como se ven obligados a hacer como autónomos, y la elección del tipo de tributación del IRPF, en lugar del 21%”. Además, a cambio del 7,5% de la facturación de los profesionales “se realiza todo el papeleo”. Otra idea para dar una base y un desahogo a los profesionales es crear un fondo de reserva para “adelanto de pagos”. En definitiva, se trata de crear un campo donde los comunicadores puedan desarrollar su trabajo con una mínima independencia económica (lo único que asegura profesionalidad).
Como segundo paso, SBP pretende crear una “cooperativa de segundo grado” que sea capaz de “aglutinar empresas que ya existen o que nazcan en el seno de la organización. Así podrán beneficiarse de las ventajas que supone competir en el mercado como parte de un gran grupo de comunicación”. La unión hace la fuerza.
