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Las compañías contra la mujer en el Alarde de Hondarribia vuelven a plantar a la igualitaria Jaizkibel

Compañía Jaizkibel en el Alarde de Hondarribia este lunes, con algunas personas dadas la vuelta a su paso

Maialen Ferreira

Bilbao —

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Un año más las compañías del Alarde de Hondarribia, en el que la participación de las mujeres se reduce a un reducido grupo de cantineras mientras que los soldados, hasta 5.000, solo pueden ser hombres no se ha presentado al horario establecido por el decreto municipal para evitar coincidir en el espacio con Jaizkibel, la compañía que defiende la participación igualitaria de los hombres y las mujeres en el desfile militar que se celebra cada 8 de septiembre. Solo un pequeño grupo de cantineras y soldados del Alarde tradicional han acudido a la cita, desobedeciendo las directrices de la Asociación para la Promoción del Patrimonio del Alarde de Hondarribia o en euskera Hondarribiko Alardearen Ondarea Sustatzeko Elkarteak (HAOSE).

El recorrido, que para Jaizkibel ha comenzado a las 08.00 horas tras concentrarse en el Árbol de Gernika, donde también se esperaba al resto de compañías, se ha realizado sin los incidentes de años anteriores, en los que al paso de Jaizkibel personas en contra de la participación de la mujer mostraban plásticos negros o carteles con mensajes como “Betiko Alardea” (“El Alarde de siempre”). Sí que ha habido algunas personas que se han dado la vuelta cuando la compañía igualitaria pasaba por las calles de Hondarribia. Sin embargo, desde Jaizkibel no han querido dar mayor importancia.

Así lo ha señalado la capitana de la compañía, Nora Ferreira, quien ha asegurado que “no le ha sorprendido”, ni el hecho de que las compañías no acatasen los horarios establecidos por la ordenanza municipal ni que varias personas les dieran la espalda a su paso. “Esperábamos ese tipo de comportamientos, pero este es un día para pasarlo bien y llevar adelante nuestras reivindicaciones”, ha apuntado Ferreira, que al igual que el resto de las más de 1.000 personas que participan en Jaizkibel, ha llevado la kufiya, el pañuelo palestino para denunciar el genocidio de Israel en Gaza también en las fiestas del pueblo costero guipuzcoano.

A su llegada al porche del Ayuntamiento han aplaudido su paso representantes de partidos políticos como EH Bildu, con su portavoz en las Juntas Generales guipuzcoanas, Maddalen Iriarte, y la parlamentaria Nerea Kortajarena, o Elkarrekin Podemos, con sus junteras en Gipuzkoa Miren Echeveste y Marivi Eizagirre, y el coordinador general de Podemos Euskadi, Richar Vaquero. Mientras que a la altura de la Iglesia de la Asunción y del Manzano han apoyado con su presencia a Jaizkibel los representantes institucionales, entre los que se encontraban miembros de los partidos de la Corporación municipal, con su alcalde, Igor Enparan, al frente, a quien Ferreira le ha entregado una carta de parte de Jaizkibel cuyo contenido aún no ha sido revelado. También ha apoyado a la compañía igualitaria la directora del Instituto Vasco de la Mujer (Emakunde), Miren Elgarresta y la secretaria general, Noemí Ostolaza.

Por su parte, el Alarde tradicional ha realizado el recorrido más tarde de lo previsto e incumpliendo su propia tradición para evitar coincidir en el tiempo y espacio con Jaizkibel. De hecho, HAOSE ha recurrido a la Justicia para evitar que Jaizkibel desfilara. Sin embargo, el Juzgado de lo Contencioso-Administrativo número 3 de Donostia ha desestimado la medida cautelarísima solicitada por HAOSE y avalado la validez del decreto que firmó para regular el Alarde de este municipio.

Para Jaizkibel, el hecho de que hayan optado por recurrir a la Justicia para evitar su presencia en el desfile supone que prefieren “dejar al pueblo sin fiesta a compartir espacios con mujeres”. “La denuncia de HAOSE en los juzgados contra el decreto del alcalde de Hondarribia demuestra que la única imposición es la que ellos ejercen. Llaman ”decretazo“, imposición del alcalde, a las resoluciones que no les gustan, y están dispuestos a hacer cualquier cosa para no cumplirlas. Este año, además de denunciar el decreto, piden medidas cautelarísimas para suspenderlo. Esto sería muy grave, porque si fuera aprobado dejarían sin fiesta, sin Alarde al pueblo de Hondarribia el 8 de septiembre de este año. Prefieren que no haya celebración a compartir los espacios con las mujeres. Olvidan, sin embargo, que la fiesta no es de ellos, es del pueblo. Y el máximo representante de la ciudadanía hondarribiarra es el alcalde”, denuncian desde Jaizkibel.

A las partidarias del Alarde igualitario tampoco les ha gustado el decreto municipal, ya que consideran que se podrían dar más pasos adelante hacia la igualdad y que pone al “mismo nivel a quienes defienden un derecho y a quienes lo niegan”. “Nosotras hemos dicho claramente que el decreto de este año no lo compartimos. En el camino del derecho de igualdad pensábamos que se podían dar pasos más audaces. Pero no compartirlo, o criticarlo, no nos llevará a no legitimarlo. El 8 de septiembre estaremos en los lugares y horas solicitadas, y el 7 de septiembre en La Salve y el aurresku. Y a partir del 9, seguiremos en el camino de la solución y estaremos en todos los espacios de diálogo, junto al equipo de Gobierno municipal, y también con la ciudadanía que quiera una solución”, defienden.

El alcalde de Hondarribia, Igor Enparan, tras el fallo judicial sostiene que el decreto municipal “solo cabe aceptarlo y respetarlo”. Algo que este lunes desde las compañías del Alarde tradicional no han hecho, pese a que Enparan ha instado a los miembros del Alarde tradicional a actuar “con civismo y tolerancia” para “evitar tensiones entre la ciudadanía”. “No sería responsable retroceder a épocas oscuras de hace décadas”, alerta. Asimismo, Enparan ha pedido la implicación del lehendakari, Imanol Pradales, de la diputada general de Gipuzkoa, Eider Mendoza, y de todas las fuerzas políticas para contribuir a “resolver en primera persona y de manera seria y directa los problemas relacionados con el respeto de los derechos fundamentales en el Alarde”, defiende.

Desde el Instituto Vasco de la Mujer (Emakunde), la directora, Miren Elgarresta, y la secretaria general, Noemí Ostolaza, han acudido a Hondarribia como cada año para mostrar su apoyo a Jaizkibel. “Es clave consolidar los avances hacia la igualdad y seguir dando pasos hacia un Alarde sin exclusiones”, han apuntado tras finalizar el desfile de la mañana. Por la tarde, ambas compañías volverán a repetir sus recorridos, a la espera de que todo ocurra con la mayor normalidad posible y sin incidentes dada las circunstancias.

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