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Juntos (pero no revueltos) contra los recortes

Aitor Guenaga

Bilbao —

Los sindicatos vascos han vuelto a celebrar el Primero de Mayo divididos. Ni los recortes, ni el crecimiento del desempleo -subida que se está produciendo con más intensidad en los últimos meses en el País Vasco- ni la crisis en general han logrado que todas las centrales desfilen detrás de la misma pancarta. Además, las centrales nacionalistas ELA y LAB -que también han salido a la calle por separado- han aprovechado sus convocatorias para calentar motores ante su convocatoria de huelga general del próximo 30 de mayo. Una movilización en Euskadi y Navarra convocada junto con otras centrales nacionalistas y medio centenar de organizaciones sociales que no apoyan los sindicatos CC OO y UGT. ELA, de hecho, afeó ayer a estos sindicatos por preferir “sentarse en las mesas del Gobierno a cambio de financiación”, en vez de sumarse a la huelga general.

Las convocatorias estuvieron marcadas por la desunión -salvo en el caso de CC OO y UGT y otro bloque de centrales minoritarias-, pero hubo mucho terreno común. Todos los sindicatos reclaman un cambio de políticas aquí, en España y en la Unión Europea. Unas políticas económicas diseñadas desde el criterio básico de la austeridad y la contención déficit y que solo han provocado “más paro y más pobreza”, según coinciden todas las centrales. Los mensajes, además, también fueron convergentes: censura a la política de recortes, defensa de los derechos laborales y sociales de los ciudadanos y denuncia de las sucesivas reformas laborales, de la negociación colectiva y de las pensiones. Pero ese suelo común no impidió un año más que el Primero de Mayo estuviera marcado por la división. Salieron juntos contra los recortes, pero no revueltos.

ELA había convocado a su militancia en Bilbao, en una manifestación con el lema “Eskubide sozialen alde. Por los derechos sociales”. Previamente, su secretario general, Adolfo Muñoz, Txiki, arengó a sus seguidores, defendió la utilidad de la huelga general y acabó con una advertencia. “ Mientras esto siga así, ELA va a seguir dando mucha guerra”.

Txiki Muñoz dejó claro al lehendakari, Iñigo Urkullu, que su sindicato no busca tumbar gobiernos con la convocatoria de la huelga general, sino cambiar sus “políticas neoliberales”. Y defendió con intensidad su independencia: “ELA no va aceptar ningún nivel de subordinación, ni de partidos, ni de gobiernos. Nuestra aproximación a la política no es partidaria. No estamos para tumbar gobiernos, sino para combatir las políticas más antisociales de los últimos 40 años”, clamó.

Animó a los presentes a no tener miedo, porque “el miedo te debilita. Con miedo no hay libertad ni democracia”. Y defendió la movilización y la huelga “La huelga general es útil y es imprescindible”. Cargó contra la patronal, a la que calificó de “lobby reaccionario”. “La patronal no necesita pactar, no quiere pactar, solo quiere imponer”. subrayó. Y también lo hizo contras las reformas y las mentiras del Gobierno del PP, una formación, recordó, con sus “máximos dirigentes salpicados de casos de corrupción”. “Es una vergüenza que un partido así pueda sangrar a los ciudadanos”.

“No tienen límites defiende tus derechos”

“No tienen límites. Defiende tus derechos”. Con este lema, CCOO y UGT de Euskadi reunieron a miles de personas en las manifestaciones conjuntas celebradas a mediodía en las tres capitales vascas. Los secretarios generales de CCOO y UGT de Euskadi, Unai Sordo y Dámaso Casado, respectivamente, habían hecho un llamamiento especial a los trabajadores a compartir la calle ante el momento “decisivo” que se vive en estos momentos. Ambos líderes sindicales vienen remarcando que desde la Transición democrática no se había producido un “ataque” tan claro contra los derechos laborales y sociales. Y los miles de manifestantes que han tomado las calles vascas lo dijeron con un lema repetido una y otra vez: “Hasta las pelotas de tantas gaviotas”, con su variación de “Hasta las pelotas de rosas y gaviotas”. Ambos líderes ofrecieron diálogo y negociación al Gobierno y a la patronal para paliar la reforma laboral, pero también defendieron la necesidad de la “confrontación” ante las “políticas antisociales”.

Por su parte, LAB convocó una treintena de movilizaciones por las distintas comarcas del País Vasco y Navarra. La secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, ha participado en la manifestación de Durango (Bizkaia). LAB ha reivindicado un proceso soberanista que implique un cambo en las actuales políticas y alumbre un nuevo “modelo propio” económico y social. Antes de comenzar la marcha Etxaide ha reclamado que se invierta en la economía vasca, en la creación de empleo y en “un modelo propio” que permita salir de la grave crisis económica por la que se atraviesa, y ha añadido “Euskal Herria puede salir de la crisis, si invierte en Euskal Herria”.

Otras centrales minoritarias también celebran hoy manifestaciones. LSB-USO convocó a su militancia en la capital vizcaína, mientras que los sindicatos ESK, STEE-EILAS, CGT y CNT, que se manifiestan de manera conjunta en las capitales vascas y navarra.

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