Servicios sociales a tres velocidades
Si usted vive en Álava, Bizkaia o Gipuzkoa, las posibilidades de acceder a una plaza en una residencia pública varían. Los mayores que viven en Álava disfrutan de mejores servicios sociales que el resto de los vascos, así que tienen más posibilidades de lograr esa plaza. Esa es la realidad hoy en día en Euskadi: tres velocidades diferentes. Para que esa brecha se cierre y todos los ciudadanos tengan derecho a las mismas prestaciones, el Parlamento aprobó en 2008 la Ley de Servicios Sociales, que recoge la cartera que define la atención que se debe prestar en todos los territorios por igual. Sin embargo, siete años después aún no hay noticias de esa cartera.
Ahora, las instituciones dan un paso más y se comprometen a cerrar una cartera de servicios sociosanitarios para 2015. Esa cartera, de aprobarse, supondrá la culminación de un objetivo largamente perseguido por todas las administraciones y de definición un tanto difusa. Se trata de los servicios que coordinan la asistencia puramente sanitaria con la social y educativa de colectivos en situación de dependencia como la tercera edad, los enfermos crónicos y las personas con alguna discapacidad física, psíquica o sensorial.
Euskadi adaptará su oferta sociosanitaria con la aprobación ese año de una cartera que unificará y homogeneizará todas las prestaciones independientemente de donde se viva. Esa cartera reorientará las prestaciones sociosanitarias, de forma que “garantice interterritorialmente una atención integral, accesible y equitativa que evite situaciones de discriminación de determinados colectivos o territorios”. Así figura en el documento presentado por el Gobierno Vasco, las tres diputaciones y los ayuntamientos, consensuadas en el seno del Consejo Vasco de Atención Sociosanitaria.
Historia sociosanitaria
La cartera recogerá, entre otras cosas, los servicios sociales de base (valoración, diagnóstico y orientación, ayuda a domicilio, apoyo a cuidadores, teleasistencia, centros de día, albergues y centros de acogida, pisos de acogida, apartamentos tutelados, residencias, atención a los casos de maltrato y adopción.....Una lista centrada en atender a personas con trastornos mentales, en riesgo de exclusión y desprotección, los que padecen discapacidad o dependencia, los niños con necesidades especiales y las personas trasplantadas y con enfermedades poco frecuentes.
El futuro modelo se basará en la elaboración de una historia sociosanitaria accesible a los equipos de atención primaria, constituidos por los trabajadores sociales municipales de base y los equipos de atención primaria de los centros de salud, ha resaltado José Antonio de la Rica, coordinador sociosanitario de Euskadi.
