El Gobierno central denunciará la “revictimización” que suponen los recibimientos a presos de ETA con motivo del Día de la Memoria

La Delegación del Gobierno en el País Vasco y el Centro Memorial de las Víctimas del Terrorismo conmemorarán juntos el Día de la Memoria con un acto este lunes 9 de noviembre en el que se dará “pleno protagonismo” a las víctimas del terrorismo y que “pondrá el foco el la revictimización de los 'ongi etorris'”.

Según han recordado sus responsables, el Día de la Memoria se celebra cada 10 de noviembre en Euskadi desde su instauración en 2010, con el objetivo de recordar a las víctimas del terrorismo. Este año, la Delegación del Gobierno acogerá en Vitoria un acto conmemorativo la víspera, el lunes 9 de noviembre, a las doce del mediodía, con la presencia del delegado del Gobierno, Denis Itxaso, y el director del Centro Memorial de Víctimas del Terrorismo, Florencio Domínguez, informa Europa Press.

Varios familiares de víctimas del terrorismo ofrecerán su testimonio en este acto. En concreto, está prevista la intervención de Iván Ramos Torrano (hijo de Maite Torrano, asesinada en un ataque a la sede de la agrupación socialista de Portugalete el 25 de abril de 1987), Lorena Díez Elorza (hermana del ertzaina Jorge Díez, escolta de Fernando Buesa, asesinado por ETA en febrero del año 2000) y Francisco Javier Sáenz Martínez (hijo de Alejandro Sáenz, ex guardia civil asesinado por ETA en 1985).

Con este reconocimiento, la Delegación y el Memorial pretenden “proclamar la verdad del sufrimiento causado por la intolerancia terrorista”, a la vez que recordar “la lucha callada y muchas veces marginada de los familiares de víctimas en Euskadi”. Los actos de homenaje para recibir a los presos excarcelados de ETA, los conocidos como 'ongi etorris', centrarán la declaración del delegado y del director del Memorial. En este sentido, denunciarán que, para las víctimas, “este tipo de 'homenajes' demuestran una nula empatía hacia ellas y desandan el camino por la convivencia”, han avanzado desde ambas entidades.

“Hay muchas formas de halagar a estos expresos sin infligir un daño innecesario y revictimizador a las víctimas”, ha apuntado Denis Itxaso. En este sentido, ha lamentado que, para las familias de las víctimas, “este tipo de exaltaciones supone revivir el infierno que les tocó padecer y se sienten doblemente víctimas al ver cómo se jalea una historia de dolor y muerte”. Para el delegado, no se trata de que los presos reconozcan el daño causado como “un mero trámite administrativo”, sino que es necesaria una reflexión “sincera”, lo que evitaría los homenajes públicos al salir de prisión.

Por su parte, Florencio Domínguez ha remarcado que el Día de la Memoria es una oportunidad “para conseguir el reconocimiento social de la injusticia sufrida por las víctimas del terrorismo”. En esta línea, ha recordado que la Ley vasca de Víctimas indica que memoria es “el reconocimiento de los ausentes, de los que fueron asesinados, pero también de los presentes, los heridos, amenazados, extorsionados, o de los familiares”.