Fallece Anxo Guerreiro, líder histórico del PCG
Anxo Guerreiro ha fallecido esta madrugada a los 67 años de edad. Geluco, referente de la izquierda en Galicia en las últimas décadas, fue diputado del PCG en la primera legislatura del Parlamento Gallego, y repitió en 1997 con Esquerda de Galicia, gracias a una coalición con el PSdeG.
Nació en una aldea de Xermade (Lugo) en 1945 pero se crió en Lugo con su familia, donde cursó sus estudios y coincidió con Xesús Alonso Montero. Comenzó a militar en el Partido Comunista en su época de estudiante univiersitario en Compostela, coincidiendo con Pancho Álvarez-Fontenla, Vicente Álvarez Areces, Rafael Bárez y Arturo Reguera. La situación le exigió asumir responsabilidades en el lanzamiento del PCG, bajo el seudónimo de Jacobo, junto a otras personas de A Coruña, muy jóvenes como él: Xan María Castro Paz, Manuel Vilares, Teresa Varela o Enrique Veira. En 1971 era miembro del Comité Central y del Secretariado del PCG, y responsable de Organización. Su actividad clandestina lo llevó a la cárcel en tres ocasiones, una de ellas incluso en la víspera de su boda.
En 1979 fue elegido secretario general del PCG, sucediendo a Rafael Pillado, y al histórico Santiago Álvarez. Como representante del PCG, fue uno de los miembros de la Comisión de los 16 que redactó el Estatuto de Autonomía de Galicia. A partir de 1986 Guerreiro compaginó la dirección de los comunistas gallegos con la figura de coordinador general de Esquerda Unida en Galicia.
En 1997, acordó acudir a las elecciones autonómicas en coalición con el PSdeG-PSOE, algo que fue desautorizado por la dirección federal de IU, liderada por Julio Anguita. La dirección federal impulsó una candidatura bajo siglas propias, ante lo que Guerreiro abandonó Esquerda Unida creando Esquerda de Galicia (EdeG), disuelta en 2002. En 2007 fue homenajeado en Compostela, en un acto organizado por la Fundación 10 de Marzo, que buscaba reconocer su labor “en la lucha por las libertades durante la dictadura y en la consecución de la autonomía para Galicia”. Entonces, Guerrero destacaba que “Moisés no entró en la Tierra Prometida, pero hay Tierra Prometida”.
Praza Público lo entrevistó en mayo del pasado año, en una conversación en la que Guerreiro se mostró muy crítico con Alberto Núñez Feijoo y el Partido Popular: “”Feijoo no sería capaz de decir lo que ha hecho en tres años, porque no ha hecho fixo nada“, pero también autocrítico con la situación de la izquierda en Galicia. Pedía ”que la socialdemocracia europea deje de ejecutar un proyecto que no es el suyo, que es un programa neoliberal“ y también la unidad ”del conjunto de las izquierdas plurales“ y la renuncia a ”reticencias o sectarismos“.
En aquella entrevista denunciaba que “los poderes financieros y las grandes corporaciones están aprovechando la crisis para acabar con lo que ellos llaman 'excepción europea del capitalismo', que es el Estado social”. Y advertía de que “la gente está reaccionando, mira lo que pasó en Francia, mira lo que pasó en Grecia, donde los dos grandes partidos están deshaciéndose, igual que pasó en Venezuela en los noventa, cuando los dos partidos mayoritarios, después de un expolio masivo y continuado de la riqueza del país, fueron casi eliminados”. También señalaba que “o cambiamos el modelo económico y productivo o Galicia y España desaparecen del mapa” y concluía que “ante los recortes, o hay una alternativa de izquierdas, o hay ley y orden y una alternativa autoritaria”.
Reacciones
CC.OO. recuerda a Anxo Guerreiro como “un líder de la izquierda nacional” y “figura central en la historia reciente de nuestro país” y destaca que fue “protagonista” en las últimas décadas, “con el compromiso y la inteligencia imprescindibles para afrontar los retos políticos que se sucedían, con la huella propia de las personas imprescindibles que poco y poco se van marchando, pero que dejan un insustituible legado político y personal”. El sindicato recuerda sus palabras, en las que hacía balance de su trayectoria política y personal: “Fui coherente con mis ideas y cumplí. Independientemente de las consecuencias, defendí mis ideas dentro y fuera del Partido con pasión y nunca renuncié a ellas por ninguna otra cosa; con disgustos, naturalmente, pero la vida sin disgustos tampoco es la vida, sería una vida irreal. Conocí a mucha gente con la que me relacioné, no sólo en el partido, por supuesto, también en la izquierda en general y de la mejor gente que yo conozco en la sociedad española y en la sociedad gallega. En resumen, fui feliz”.
Esquerda Unida lamenta el fallecimiento de un “político brillante, inteligente y de gran dialéctica”, del que destaca “su compromiso por la defensa de los derechos y de la libertad” en la lucha en la clandestinidad contra el franquismo y que “fue un hombre comprometido con la lucha de la izquierda y que pasó por la cárcel como muchos compañeros y compañeras que pelearon contra la dictadura”.
Por su parte, Camilo Nogueira (BNG) compartió trabajo, lucha política y amistad durante décadas con Guerreiro, y mostraba esta mañana su tristeza por su muerte y su admiración por Geluco: “si tuviera que buscar una persona con la que me identificaría en el comportamiento humano y político, sería con Geluco. Sería la persona que a mí me gustaría imitar. Cuando estábamos juntos y hablábamos éramos como hermanos, teníamos una sintonía tremenda para analizar el fondo de todos los problemas de Galicia como del mundo. Galicia ha perdido una gran persona, aunque el trabajo que hizo no se pierde”.