La reunión de presidentes de comunidades despobladas peligra por el uso partidista de Feijóo

“Que yo sepa aún no se ha desconvocado”. En estos términos se pronuncia el portavoz de uno de los barones socialistas que el próximo 2 de noviembre tenía previsto participar en Santiago en la reunión de presidentes de comunidades despobladas para reclamar un modelo de financiación que tenga en cuenta criterios como el declive poblacional o la dispersión. La reunión está ahora en el aire después de que el anfitrión, Alberto Núñez Feijóo, la usase como arma política este miércoles durante el debate del estado de la Autonomía que se celebra estos días en el Parlamento de Galicia. La socialista Concha Andreu, presidenta de La Rioja, ya ha anulado su presencia en la reunión. Otros invitados del PSOE se lo están pensando.

Durante su discurso en el Parlamento gallego Feijóo cargó contra el Gobierno de Pedro Sánchez y le acusó que querer establecer el modelo de financiación a gusto de los independentistas catalanes. Lo hizo minutos después de sacar pecho de que Galicia sería esta vez la sede de un debate sobre la materia con presidentes de varios colores políticos: “De nada me siento más orgulloso que de que nuestra tierra sea una vez más escenario de la política que vale la pena”, aseguró.

En ese contexto llegaron las palabras de Feijóo que encendieron los ánimos del PSOE: “Quiero pedir con claridad que la financiación autonómica no se decida en una mesa bilateral con el único gobierno autonómico que manifiesta abiertamente estar en contra de la nación”.

Además de la primera baja confirmada, la lista de cargos socialistas que han salido manifestando su malestar con el presidente de la Xunta ha sido elevada. Desde Asturias, Aragón y Extremadura sus presidentes han advertido a Feijóo de que no están dispuestos a participar en un frente que tenga como objeto desgastar al Gobierno central.

“Si alguien pretende que lo que vamos a ir a echar ahí es a ver cómo atacamos a otras comunidades autónomas o al Gobierno, conmigo que no cuenten”, ha dicho el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara. En la misma línea se han pronunciado Adrián Barbón (Asturias) y Javier Lambán (Aragón)

La reunión prevista para principios de noviembre se ha realizado con formatos similares en varias ocasiones durante los gobierno de Mariano Rajoy y Pedro Sánchez. Esta última convocatoria se activó el pasado mes de julio por los presidentes autonómicos Alberto Núñez Feijóo y Alfonso Fernández Mañueco (PP), además de los socialistas Emiliano García Page y Javier Lambán. “Se activó como respuesta a los movimientos de otros territorios como Valencia y Andalucía”, aseguran a elDiario.es fuentes conocedoras del proceso.

El plan pretende establecer un discurso alternativo al de comunidades como Andalucía, Madrid, Valencia o Baleares que piden un reparto de fondos que atienda fundamentalmente a criterios como el número de habitantes que tiene cada territorio. Los presidentes de las comunidades más despobladas pretenden que las dificultades para prestar servicios a los ciudadanos que viven en zonas despobladas, con dispersión poblacional o envejecidas sean tenidos en cuenta a la hora de repartir el dinero. En este punto, Feijóo había encontrado una posición de centralidad con capacidad para tejer acuerdos con políticos de otras formaciones y enfrentar sus posiciones con las de compañeros de partido como la popular Isabel Díaz Ayuso. En esta ocasión, además sumaba su posición como anfitrión en un evento cuya celebración está prevista en Santiago de Compostela, en plena celebración del Año Xacobeo. Ahora, todo está en el aire y la celebración de la reunión es todavía una incógnita.