Baile de personal en las filas de Call of Duty
La vida del estudio Infinity Ward ha sido tan productiva como movida si tenemos en cuenta el ir y venir de directivos, sobre todo con la gran ruptura protagonizada en 2010 por Vince Zampella y Jason West, principales responsables del estudio y creadores originales de la exitosísima licencia Call of Duty, quienes partieron Infinity Ward en dos tras discutir con la editora Activision, pasando a formar Respawn Entertainment, un nuevo estudio de desarrollo bajo el abrazo de Electronic Arts.
El caso es que uno de los grandes que les acompañaron en dicha ruptura, Todd Alerman, vuelve a Infinity Ward para ocuparse de la dirección del modo multijugador del nuevo Call of Duty preparan para 2016, en un movimiento que David Stohl, máximo responsable del estudio, ha calificado como la forma de “fichar al mejor talento para la mejor posición”.
Pero por otro lado nos encontramos con un abandono, el de Mark Rubin, quien durante muchos años ha sido el principal productor de los Call of Duty desarrollados por este estudio. Por ahora no se sabe quién ocupará su puesto, pero sí que desde Infinity han fichado a otros tantos profesionales como Taylor Kurosaki, Michal Drobot y Jacob Minkoff en un intento por llenar sus filas de talento.
¿Qué podemos decir ante tal baile de personal? Pues que parece quedar claro que en Infinity Ward quieren ponerse las pilas contratando a profesionales con un gran currículo a sus espaldas, seguramente con el fin de no perder prestigio frente a Treyarch y Sledgehammer Games, los otros dos estudios encargados de desarrollar juegos de Call of Duty.
