Así interpreta la prensa especializada la victoria de 'Moonlight' en los Oscar 2017

Superado el bochorno de ver a un equipo ilusionado de productores devolver sus estatuillas, o lo que es peor, entregárselas a sus legítimos ganadores [es unánime la alabanza a la actitud con la que los artífices de La La Land asumieron su derrota], la prensa especializada en cine analiza qué significa la victoria de Moonlight en medio del caos. Resumimos algunas reacciones de los medios con más prestigio en Hollywood.

The Hollywood Reporter. La mayor de las debacles

The Hollywood ReporterEl columnista de The Hollywood Reporter especializado en premios, Scott Feinberg, publica un artículo titulado “Una mirada más de cerca a un resultado ensombrecido por el caos”. La columna comienza dando cuenta del shock en el que continúa la prensa, para luego admitir que el resultado falso que daba a La La Land como ganadora... no era en absoluto perjudicial para la Academia de Hollywood: “El resumen de la noche no podía haber sido más positivo para la Academia. Jimmy Kimmel había hecho su trabajo, la controversia #OscarsSoWhite estaba remitiendo con dos premios interpretativos para intérpretes negros y para los guionistas de Moonlight, y La La Land, el musical que celebra a los artistas y soñadores de Hollywood, había ganado el Oscar a la Mejor Película. Hasta que no fue así”.

A continuación Feinberg enumera los errores que llevaron a la falsa proclamación de La La Land, para después ensalzar lo extraordinario de la victoria de Moonlight. “Incluso si la victoria de Moonlight se hubiera anunciado limpiamente, habría provocado que muchos tragaran saliva en el teatro, porque representa una de las mayores sorpresas en la historia de los Oscar, probablemente la mayor, si exceptuamos a Crash venciendo a Brokeback Mountain hace 11 años. Pero por la forma en que se produjo”, continúa Feinberg, “al equipo La La Land se le hizo sentir como perdedor, sin importar sus seis estatuillas, y el equipo Moonlight nunca pudo celebrar su momento Cenicienta con la desinhibición que merecían”.

The Playlist. Cambio en la historia de los Oscar

The PlaylistEl periodista de The Playlist Gregory Ellwood prefiere ampliar el foco y analizar qué significa la victoria de Moonlight, con o sin fiasco, para la historia de los Oscar. Ellwood recuerda que la Academia ha votado por una película de presupuesto íntimo, negra, gay y sin nombres demasiado reconocibles en el equipo artístico. “Algo ha cambiado, claramente”, dice el periodista. “Puede que hayan sido los 600 nuevos miembros de la Academia... junto a los 120 a los que les han sido revocados sus privilegios de voto. Puede haber sido el clima político. Puede que algunas películas nominadas en pasadas ediciones [Her, El árbol de la vida, La habitación, Whiplash] hayan abierto los ojos y los corazones de los miembros más veteranos. Seguramente haya sido una combinación de varios factores”, concluye, “pero lo que es cierto es que va a tener un impacto en los Oscar de cara al futuro”.

“Sí, seguirá habiendo nominaciones de la vieja escuela como Hasta el último hombre o El francotirador que seguirán encontrando eco entre los votantes”, admite Ellwood en su artículo, “sí, Emma Stone seguirá ganando como Mejor Actriz a Isabelle Huppert en el futuro, pero habrá también muchos más Barry Jenkins y Mahershala Alis en los próximos años. No ha ocurrido de un día para otro, pero ha ocurrido. Es una Academia que abraza el arte de su arte, y que se mueve hacia delante y no hacia atrás. Dentro de varias décadas, cuando los historiadores examinen cuándo la Academia cambió, verán que en realidad todo cambió con MoonlightMoonlight. Así que olviden el fallo. Ignoren las teorías de la conspiración. Esto es algo para celebrar. Este es el poder que una institución como los Premios de la Academia, y la temporada de premios que estos galardones generan, puede tener en la sociedad”.

Variety. La responsabilidad de Trump

VarietyEn la revista Variety han optado por publicar un artículo, en forma de diálogo, en el que dos de sus críticos opinan sobre la ceremonia. El texto arranca con una afirmación de Peter Debruge: “No hay momento en la historia de los Oscar que pueda rivalizar con la magnitud de este error”. Y a partir de ahí, llega la defensa de Moonlight. “Aunque me encanta que Damien Chazelle haya creado un musical original que habla de las relaciones modernas, no merecía ganar. Tampoco merecía la humillación de lo que pasó, e incluso peor es que el momento histórico de Moonlight fuera ensombrecido por la confusión”. En su primera respuesta, el crítico Owen Gleiberman recuerda que hay mucho apoyo a La La Land en la industria [por ejemplo el suyo propio]: “Este año se ha producido una competición diferente, ha sido una película roja contra una película azul [en referencia a los republicanos y los demócratas]. Y es irónico que la opción conservadora haya sido un musical de estilo clásico, hecho por un joven y atrevido cineasta, que muy pocos esperaban que fuera un éxito de taquilla”.

Gleiberman se lamenta de las críticas que han tachado a La La Land de “feel-good movie”, escapista, de no tener personajes gays. “Un voto por Moonlight se convirtió en un voto por el arte progresista y por la política progresista, mientras que un voto por La La Land de repente se convirtió... en un voto por el status quoLa La Land”, dice. Debruge pide que se analice qué ha pasado entre las 14 nominaciones del musical [récord en la historia de los Oscar] y la ceremonia: “Lo que ha pasado ha sido la llegada de Trump al gobierno y sus políticas anti-inmigración. La evidencia más clara es la victoria de Farhadi con El viajante. La La Land está bien, pero no está tan bien, mientras que Moonlight es un verdadero éxito revolucionario, una historia que al Hollywood progresista no le habría merecido la pena contar hace muy poco tiempo”. Y Gleiberman cierra este asunto con una última reflexión: “He venido percibiendo que había llegado el momento de que una película pequeña y revolucionaria ganase el Oscar a la Mejor Película. Pensé que pasaría con Boyhood, y en su lugar ha pasado con Moonlight. Ahora nos encontramos ante un nuevo paradigma en los Oscar”.