Ley de segunda oportunidad, una forma legal de eliminar las deudas de cientos de autónomos
En la actualidad, existen un gran número de personas que se encuentran en una situación de insolvencia que les imposibilita el reintegro a su actividad económica habitual al no poder hacer frente a sus obligaciones financieras.Como resultado, España ha aprobado e implementado en los últimos años un procedimiento legal conocido como ley de segunda oportunidad. Su propósito principal es permitir que las personas particulares o autónomas tengan la oportunidad de renegociar sus deudas para que puedan ser canceladas total o parcialmente.De esta manera, la Ley busca crear un equilibrio entre acreedores y deudores, de forma que los deudores puedan hacer frente a sus situaciones de insolvencias sin comprometer su patrimonio presente y futuro. Por otro lado, los acreedores pueden proteger sus derechos de cobro al poder recibir una parte de las deudas pendientes.El impacto de este mecanismo legal en la comunidad española cada vez es más grande, no solo en personas particulares, sino que se ha expandido a autónomos y pequeños negocios que se ven en la obligación de solicitar apoyo a través de este medio para poder solventar su situación financiera.A continuación, explicaremos de forma detallada todo lo que se necesita saber acerca de esta ley, incluyendo los requisitos y procedimientos necesarios para poder optar por ella.
¿Qué es la ley de segunda oportunidad?
La Ley de Segunda Oportunidad, también conocida como Mecanismo de Segunda Oportunidad, es una ley española que entró en vigor a partir del 2015, con el propósito de encarrilar la vida de las personas con fracasos financieros, empresariales o personales, ofreciendo la posibilidad de hacerle frente a sus deudas a través de los canales legales.El objetivo de este procedimiento, se centra en auxiliar a personas o entes deudores a solventar aquellas obligaciones que han adquirido, sin la necesidad de llegar a la quiebra total, permitiendo reorganizar y reincorporarse a las actividades económicas, además de arriesgarse a nuevas iniciativas.De igual forma, la ley de segunda oportunidad autónomos y particulares, cumple múltiples funciones, entre ellas, una función social, al permitir la reincorporación de un número significativo de personas a la economía ciudadana, también resalta la disposición de los acreedores sin descuidar su derecho al cobro, promueve la economía formal y disuade implementar la economía sumergida.
Requisitos para acogerse a la Ley de Segunda Oportunidad
Desde su última reforma en el año 2022, la Ley de Segunda Oportunidad, ha pautado una serie de requisitos que el deudor debe presentar como acto de buena fe para ser tomado en cuenta este procedimiento legal.Esta ley tiene en cuenta en primera instancia el historial crediticio del deudor en situación de insolvencia, en donde debe demostrar que a pesar de ser un buen pagador, atraviesa una situación económica decadente. Los requisitos que debe presentar se mencionan a continuación:
- Se debe demostrar que es un deudor insolvente que no cuenta con el patrimonio necesario para hacer frente a las deudas.
- El autónomo o particular debe actuar de buena fe.
- Haber intentado previamente acuerdos extrajudiciales de pagos sin éxito alguno.
- Debe tener más de un acreedor.
- No haberse acogido al beneficio de la Segunda Oportunidad en los últimos cinco años.
- El deudor debe estar libre de condenas por delitos económicos o patrimoniales en los últimos 10 años.
- Las deudas no deben superar los cinco millones de euros.
¿Cómo presentar la solicitud de la Ley de Segunda Oportunidad?
El primer paso es contar con el asesoramiento adecuado para garantizar una gestión adecuada en el proceso judicial. Una vez recaudados todos los documentos necesarios de forma clara y detallada donde se acredite la situación de insolvencia del deudor, se puede dar inicio a la solicitud.Cabe destacar, que se debe acudir a un Juzgado Mercantil para presentar la declaración de concurso. Una vez tramitada la solicitud se da comienzo a la fase judicial, donde se presentan dos modalidades, el deudor tendrá la opción de elegir entre la exoneración con liquidación de patrimonio o sin liquidación pero con plan de pagos.
Ventajas de la Ley de Segunda Oportunidad
Al ser la Ley de Segunda Oportunidad una herramienta para poder solventar deudas, brinda una serie de beneficios o ventajas a tener en consideración, entre ellos destacan:
- La protección del deudor, al evitar el embargo de bienes.
- Refinanciamiento de deudas con los acreedores.
- Los recargos e intereses quedan paralizados, es decir, no pueden aumentar mientras exista el proceso legal.
- Los deudores no ficharán en las listas de morosidad.
- Planificar un calendario de pagos de hasta cinco años para cancelar sus deudas.
- Posibilidad de mantener en funcionamiento sus negocios, con algunas limitaciones.
- Retomar la posibilidad de solicitar tarjetas, créditos o préstamos.
- Aseguración de una parte del patrimonio, reservado para las necesidades familiares y empresariales.
- Evadir la economía sumergida, al no recurrir a alternativas financieras fuera del marco legal.
Limpiar la reputación de los deudores, con el fin de tener la oportunidad de emprender en nuevos negocios y comenzar de cero.