Hyundai ya tiene su GTI, el i30 N
En un acto celebrado en Düsseldorf, Hyundai acaba de dar a conocer las dos nuevas criaturas que completan la familia i30. Una es una nueva carrocería extendida en 115 milímetros y con más maletero, llamada Fastback; con la otra inaugura sus trabajos la división de modelos deportivos de la marca coreana, que lucirán el distintivo N.
En noviembre llegará a los concesionarios este musculoso i30 N, un auténtico GTI dotado de un motor turbo de dos litros de cilindrada y dos niveles de potencia: 250 caballos en su versión normal y 275 en la denominada Sport Pack, ambas con cambio manual de seis velocidades, tracción delantera y carrocería únicamente de cinco puertas.
El nuevo modelo aprovecha la experiencia de Hyundai en competición y, más en concreto, de sus dos recientes participaciones en las 24 Horas de Nürburgring. De ahí que incorpore tecnologías que sustentan su vocación deportiva, entre ellas un diferencial electrónico de deslizamiento limitado, suspensión controlada electrónicamente, dispositivo de ajuste de revoluciones, sistema de salida Launch Control, neumáticos de altas prestaciones y temporizador de vueltas en circuito.
El Sport Pack añade a estos elementos un autoblocante electrónico, discos de freno de mayor tamaño, pinzas específicas de color rojo y sistema de válvula de escape variable, además de unos neumáticos Pirelli PZero desarrollados ad hoc.
Naturalmente, un coche de este corte debe proclamar a los cuatro vientos su naturaleza, y de ello se encargan los paragolpes con tomas de aire sobredimensionadas y una línea roja que los recorre, el alerón trasero con luz de freno triangular, el escape con doble silenciador, los asientos deportivos y unas llantas que oscilan entre 17 y 19 pulgadas. Y, por supuesto, un sonido de lo más atractivo que se potencia por medios electrónicos.
La mano de Albert Biermann, jefe de la división N de Hyundai y antes responsable de BMW M, se aprecia en los programas de conducción de que dispone el i30 N, similares a los que poseen los modelos bávaros: Normal, Eco, Sport, que se seleccionan en la parte izquierda del volante, y –pensando en una eventual utilización en circuito– N y N Custom, accesibles estos a través de otro botón en el volante señalado con una bandera a cuadros.
Pedales remachados en aluminio, relojes de inspiración deportiva y una pantalla táctil (opcional) de 8 pulgadas donde podemos consultar la acción del turbo, el cronómetro de vueltas y la aceleración rematan por dentro este rabioso vehículo capaz de pasar de 0 a 100 km/h en 6,2 segundos (6,4 la versión menos potente).
Por su parte, el Fastback dispone de una carrocería más larga que la del i30 convencional, a caballo entre un dos y un tres volúmenes, y de un maletero de mayor capacidad al tiempo que exhibe unas proporciones más musculosas gracias a sus 30 milímetros menos de altura, un pilar trasero ancho y unos hombros traseros notablemente marcados.
Esta nueva versión del compacto coreano, que tendrá su propia variante N en el futuro, se pone a la venta en enero de 2018 con dos motores iniciales de gasolina, de 120 y 140 caballos, a los que se sumará un propulsor turbodiésel que ofrecerá dos potencias diferentes, 110 y 136 caballos.