Stellantis lo apuesta todo a la electrificación y el 'software'
En una jornada organizada por el consorcio Stellantis, su CEO Carlos Tavares y otros ejecutivos del grupo han desgranado los planes para una transición acelerada hacia el coche eléctrico, así como los ingresos que prevén obtener y las inversiones necesarias para conseguirlos. La estrategia recae sobre el desarrollo de software, y especialmente las suscripciones habilitadas a través de él, y de diversas tecnologías vinculadas a la electrificación y la actualización de su catálogo de producto.
En concreto, Stellantis planea ingresar por esta vía aproximadamente 4.000 millones de euros anuales para 2026 y unos 20.000 millones para 2030. Para ejecutar la transformación del software y la electrificación serán precisas inversiones de alrededor de 30.000 millones de euros solo hasta 2025.
El consorcio francoitaliano apuesta muy claramente por avances en el campo de las llamadas actualizaciones over-the-air (OTA), o inalámbricas, que permiten ofrecer a los usuarios nuevas características y servicios que mantienen sus vehículos actualizados incluso años después de ser fabricados. También se fija en las posibilidades del denominado DaaS (Data as a Service) y de los servicios para flotas, entre otros.
En la actualidad, Stellantis cuenta con 12 millones de coches conectados monetizables -condición que se refiere a los primeros cinco años de vida del vehículo- en todo el mundo. Para 2026 se espera que esta cifra aumente a 26 millones de vehículos y genere aproximadamente unos ingresos de 4.000 millones de euros; para 2030, se alcanzarán los 34 millones de vehículos y aproximadamente 20.000 millones de euros de ingresos anuales. Aprovechando su capacidad de recopilación de datos, el grupo lanzará además, en 2022, un programa de seguros basado en el uso del coche.
La estrategia centrada en las mejoras de software va de la mano de los planes de electrificación de los vehículos de la compañía, anunciados en el EV Day celebrado en julio de este año. Entonces se apuntó como objetivo que más del 70% de sus ventas de vehículos en Europa y más del 40% de las de Estados Unidos sean de modelos de bajas emisiones para 2030. Cada una de las 14 marcas de la empresa se ha comprometido a proporcionar las mejores soluciones electrificadas de su segmento.
Con el fin de paliar la actual escasez de los semiconductores, Stellantis ha suscrito un acuerdo con la firma Foxconn para diseñar una familia de microchips específica para vehículos del grupo pero que podrían usar terceros clientes. La alianza pretende crear cuatro familias de dispositivos que cubrirán más del 80% de las necesidades de microchips de la empresa, lo que contribuirá a simplificar en gran medida la cadena de suministro. La llegada de estos productos a los modelos Stellantis está prevista para 2024.
Nuevas plataformas tecnológicas y de vehículos
Todo este despliegue tendrá como base tres nuevas plataformas tecnológicas a escala que se lanzarán en 2024 y que recalarán durante los dos años siguientes en las cuatro plataformas de vehículos previstas para entonces. El corazón de esta estrategia es la nueva arquitectura STLA Brain, totalmente compatible con las actualizaciones OTA e integrada en la nube, que conecta las unidades de control electrónico del vehículo con la informática de alto rendimiento mediante la transferencia de datos de alta velocidad.
Esta tecnología rompe el vínculo actual entre las generaciones de hardware y software, lo que permite a los desarrolladores de este último crear y actualizar rápidamente las funciones y los servicios sin esperar al lanzamiento de un nuevo hardware. Las actualizaciones OTA reducen drásticamente los costes, tanto para los clientes como para la empresa, simplifican el mantenimiento para el usuario y mantienen el valor residual de los vehículos.
Por su parte, STLA SmartCockpit, basado en STLA Brain, suministrará aplicaciones basadas en la inteligencia artificial como navegación, asistente de voz, comercio electrónico a través de un marketplace y servicios de pago. STLA AutoDrive, desarrollado en colaboración con BMW, ofrecerá capacidades de conducción autónoma de nivel 2, 2+ y 3, y se pondrá al día continuamente mediante actualizaciones OTA.
El impulsor de la metamorfosis del grupo Stellantis, Carlos Tavares, ha señalado que sus planes de electrificación y software respaldarán el cambio para convertirlo en “una empresa de tecnología de movilidad sostenible líder, aprovechando el crecimiento del negocio asociado a las funciones y servicios over-the-air”.
“Con las tres plataformas tecnológicas completamente nuevas dotadas de inteligencia artificial, que llegarán en 2024 y se desplegarán en las cuatro plataformas de vehículos de STLA, aprovecharemos la velocidad y la agilidad asociadas al desacoplamiento de los ciclos de hardware y software”, ha añadido el CEO del consorcio.