Revilla afronta su último reto antes de la retirada: “Vamos a ganar las elecciones”

La felicidad en el Partido Regionalista de Cantabria (PRC) es casi absoluta. Ni en sus mejores sueños se podían imaginar sus dirigentes un periodo final de la legislatura tan plácido, tan alejado de las polémicas, con el viento tan a favor. Esa sensación de calma se traslada incluso a los más desconfiados, que se preguntan en voz baja qué se les puede estar escapando, qué nubarrones pueden llegar por el horizonte sin tenerlos previstos, qué les puede estropear la fiesta que esperan celebrar en mayo de 2019.

Ese sentimiento de superioridad, de favoritismo de cara a las elecciones autonómicas y municipales del próximo año, se deja notar en las caras de los militantes regionalistas. El PRC ha celebrado este domingo en el Paraninfo de la Universidad de Cantabria en Santander su XII Congreso Regional entre sonrisas, abrazos y aplausos. Conscientes de que la unidad es un bien a proteger en estos tiempos convulsos, han estado a punto de olvidar el debate a cambio de la unanimidad.

Ha sido en ese escenario de optimismo y camaradería en el que Miguel Angel Revilla ha sido reelegido este domingo como secretario general del PRC y candidato a la Presidencia de Cantabria por 707 votos a favor y tan solo dos abstenciones. También el nuevo comité ejecutivo se ha aprobado con los mismos votos a favor, uno en contra y una abstención, en una votación a mano alzada que ha concluido con una cerrada ovación a su líder, que afrontará por décima ocasión consecutiva una cita con las urnas como cabeza de cartel.

Revilla, que cumple 76 años en enero, se enfrentará la próxima primavera a su último reto antes de la retirada: “Sí, vamos a ganar las elecciones. No por vanidad, sino porque Cantabria necesita que gobernemos, porque nadie nos manda desde Madrid, porque conocemos Cantabria como nadie y gobernamos para nuestra gente”, ha expresado con rotundidad.

Sucesión pendiente

Previamente, el líder de los regionalistas cántabros había insistido en que, ahora sí, estaba ante su última etapa al frente de la formación que fundó hace 40 años. “Sé que alguno no se lo cree, porque lo he dicho tantas veces... Yo ya no puedo hacer más que lo que me pedís. Pero sé que ya nunca me lo vais a volver a pedir, sé que esta vez no volveréis a decirme que me presente. Y os pido que si tengo esa ocurrencia, me lo quitéis de la cabeza, me lo impidáis”, ha llegado a decir.

El melón que lleva tantos sin tocarse se abrió por fin. Otras veces ha sido el propio Revilla el que ha mostrado dudas sobre su continuidad, por su salud o su familia, pero nunca de forma tan explícita. La sucesión del histórico dirigente del PRC ha dejado de ser un tabú en el partido y, desde este momento, casi cualquier decisión que tome el actual presidente de Cantabria será interpretada en una u otra dirección. Si como apuntan las encuestas alcanza de nuevo la Presidencia del Gobierno, la formación de ese Ejecutivo será mirado con lupa en busca del delfín.

Sin embargo, todavía queda mucho tiempo para eso, meses de precampaña electoral, y entre los regionalistas parece clara la consigna: todos a una a por una victoria que sería histórica, situando al PRC como primera fuerza política en Cantabria cuando acaban de cumplirse 40 años desde el nacimiento del partido.

Por eso, aunque Revilla ha verbalizado su deseo de que dentro de cuatro años alguien tome el reemplazo, también ha pedido confianza y generosidad: “De ilusión, cabeza y proyectos estoy como nunca. No voy a dar la espantada, pero me tenéis que echar una mano. Las cosas están bien para cumplir ya el último reto”, ha recalcado, en referencia a la ansiada victoria en las urnas que se le ha resistido hasta el momento, pese a sus tres legislatura como presidente de Cantabria.

En este Congreso Regional del PRC, en el que también se han aprobado sin apenas discusión las nueve ponencias que guiarán el programa de gobierno con el que la formación cantabrista concurrirá a las elecciones autonómicas y locales del próximo año, se han dado pocas pistas sobre quién puede ser el 'delfín' de Revilla, ya que el núcleo duro permanece inalterable.

De hecho, en el nuevo comité ejecutivo, formado por 60 militantes, apenas hay bajas y destaca únicamente la incorporación del exconsejero Vicente Mediavilla; de Javier López Estrada, teniente de alcalde de Torrelavega; José Luis Gochicoa, director general de Obras Públicas; Javier Ontañón, director de gabinete de José María Mazón; y el alcalde de Marina de Cudeyo, Severiano Ballesteros.

También son de nueva incorporación Emilia Aguirre, Fidel Cueto, Jaime Díaz, Rosa Fernández, Jesús Goñi, Leticia López, Gema Perojo y Paloma Santillán. Como responsable económico financiero ha sido reelegido Alfredo Trueba, y en la Comisión de Garantías y Derechos entran Asunción Cuevas y Valentín Pardo.

Tras ser reelegido secretario general, Revilla ha puesto en valor a las personas que integran el PRC: “Un lujo de gente, la mejor que pueda tener un partido”, ha dicho, por lo que se ha mostrado convencido de que no habrá problema a la hora de elegir a un sucesor o una sucesora. “Será una persona identificada con esta tierra y con vocación de servicio”, ha subrayado. 

Tras las votaciones y la foto de familia, el acto de clausura propiamente dicho ha comenzado con un vídeo enviado por el presidente de México y amigo personal de Revilla, Andrés Manuel López Obrador. En su mensaje, el mandatario ha definido al líder regionalista como “un dirigente excepcional y el político más simpático del mundo”.

En un discurso de más de una hora de duración, Revilla ha dibujado al PRC como “un partido unido, que sabe pactar y gobernar. ”Un partido radical contra la corrupción“ que se caracteriza por ”su amor a Cantabria“, que ”conoce el territorio como nadie y sabe lo que quiere la gente“. 

Ha añadido que el PRC es un partido “previsible y unido”. “Hasta demasiado unido, porque me ha dado vergüenza no haber tenido ningún voto en contra”, ha bromeado. En alusión a las divisiones internas de otros partidos de Cantabria, ha afirmado que “si un partido no está unido y se dan de leches entre ellos, difícilmente van a poder solucionar los problemas de los demás”, y ha defendido que una vez elegido un líder, “hay que apoyarle a muerte”.

40 años de carrera política

Revilla, que cumplirá 76 años el próximo 23 de enero, ha sido reelegido secretario general del PRC y candidato a la Presidencia por décima ocasión consecutiva. Licenciado en Ciencias Económicas y diplomado en Banca y Bolsa por la Universidad del País Vasco, es director de banco en excedencia. En 1976 creó la Asociación para la Defensa de los Intereses de Cantabria (ADIC), pionera en la defensa de Cantabria como comunidad uniprovincial, y a partir de ella fundó, en 1978, el Partido Regionalista de Cantabria, del que es diputado desde 1982.

En 1988, el Congreso del PRC lo eligió por primera vez secretario general, cargo que ha revalidado en todos los sucesivos congresos del partido. En las legislaturas 1995-1999 y 1999-2003 fue vicepresidente y consejero de Obras Públicas, Vivienda y Urbanismo en los gobiernos de coalición PP-PRC.

Ha sido presidente de Cantabria desde 2003 a 2011, en virtud del pacto con el PSOE, y tras un paréntesis de cuatro años, en los que el PP gobernó con mayoría absoluta, volvió a ser reelegido presidente gracias a la abstención de Podemos, ya que esta vez PRC y PSOE se quedaron a un escaño de la mayoría absoluta.

Ponencias

El fortalecimiento del Estado del Bienestar, mediante más y mejores servicios públicos esenciales, como la educación, la sanidad y política social, y la igualdad de oportunidades; el protagonismo de los municipios, tanto urbanos como rurales; el desarrollo rural, con políticas contra la despoblación; la cohesión social, mediante más y mejores infraestructuras, y políticas productivas; la reafirmación de los principios de honradez, cercanía, sentido común, eficacia y solidaridad en la gestión pública; y la necesidad de un cambio de rumbo para Santander, son los ejes de las ponencias aprobadas.

Los regionalistas abogan por asumir la gestión de la Educación de Cantabria, una competencia que nunca ha estado en sus manos en sus 20 años en el gobierno. En empleo, quieren dejar de ser “meros ejecutores” de las políticas dictadas por el Ejecutivo central, por lo que plantean la modificación de la Constitución y la reestructuración del Servicio Cántabro de Empleo.

El PRC subraya la necesidad de que Cantabria sea declarada Zona de Específica Reindustrialización y Fomento de la Competitividad Industrial, con especial mención a la Comarca del Besaya, y aboga por “impulsar” la internacionalización de las relaciones comerciales, industriales y turísticas cántabras mediante la creación de una oficina 'Marca Cantabria'.

Asimismo, considera importante mantener la política de suelo industrial y la defensa de los proyectos del Centro Logístico del Llano de La Pasiega y la mina de zinc. La reclamación de la deuda histórica que el Estado mantiene con Cantabria en infraestructuras es otro de los objetivos de los regionalistas.

Así, continuarán con “el mismo nivel reivindicativo” con las conexiones ferroviarias, tanto el tren a Madrid como a Bilbao, y el Plan de Cercanías, las conexiones viarias, 3 carril A-8, Los Tornos, Lanestosa o La Hermida, entre otras .

Por otro lado, plantean el blindaje del Fondo de Cooperación Local y apuestan por un nuevo rumbo para Santander, que en su opinión “puede ser mucho más de lo que es” y está llamada a ser el motor productivo de Cantabria, tal como ha defendido el Comité Local de la capital cántabra.