El rector de la UPV: los recortes tienen efectos “muy graves” en la enseñanza universitaria
El rector de la UPV/EHU, Iñaki Goirizelaia, ha denunciado que los recortes presupuestarios que sufre la universidad pública vasca, con una reducción de 90 millones de euros en la aportación ordinaria del Gobierno autonómico, tienen efectos “muy graves”, por lo que ha reclamado que se revierta esta situación ante el riesgo de un notable “retroceso” en la enseñanza superior de Euskadi.
Goirizelaia ha realizado esta advertencia durante su comparecencia ante la Comisión de Educación del Parlamento vasco, a la que ha informado sobre las “dificultades” que atraviesa la UPV-EHU. El rector ha expuesto el grado de cumplimiento del 'Plan universitario 2011-2014', del que ha afirmado que en origen “era un buen plan”, pero sobre el que ha lamentado que no haya sido posible cumplirlo debido a las restricciones presupuestarias padecidas en los últimos años, especialmente en 2013 y 2014.
Goirizelaia ha destacado que la aportación ordinaria que el Gobierno vasco realiza a la UPV/EHU a través de este plan se ha reducido en 90 millones de euros, un 7,46 por ciento menos que lo proyectado. El “incumplimiento” de esta previsión presupuestaria, junto con los recortes derivados de las medidas impuestas desde el Ejecutivo central, están resultando “muy graves” para la universidad vasca, tal y como ha explicado.
“Doloroso e injustificable”
El rector ha calificado de “especialmente dolorosas e injustificables” las reducciones que repercuten sobre los jóvenes. Asimismo, ha subrayado que uno de los recortes más significativos se ha producido en la partida de mejora y mantenimiento de las instalaciones, que ha pasado de doce millones anuales, a tres millones en 2012 y otros tres en 2014.
Según ha afirmado, si estos recortes se mantienen, la universidad volverá a sufrir desperfectos y situaciones de mantenimiento precario “que ya creíamos superadas”. En este sentido, ha explicado que la dotación para obras menores se ha visto reducida en un 76 por ciento, y que la partida para mobiliario ha caído un 52,5 por ciento. El gasto en equipamiento para laboratorios ha bajado un 30,4 por ciento, mientras que en equipamiento informático se ha reducido un 25,4 por ciento. Los contratos programa también se han visto afectados, dado que la UPV/EHU ha recibido por esta vía 29,3 millones de euros menos de los contemplados en el plan 2011-2014, lo que supone un 19,92 por ciento menos.
Entre otros efectos de la reducción de estos contratos programa ha citado la imposibilidad de contratar al personal técnico necesario para la docencia y la investigación. Asimismo, ha reconocido que existe un “notorio déficit” de personal de administración y servicios. Estos trabajadores se encargan de la gestión de los programas de master y doctorado, por lo que la escasez de plazas “condiciona la posibilidad de avanzar en proyectos docentes innovadores o de investigación”.
La distancia frente a otros territorios se reduce
Por otra parte, el plan plurianual de inversiones ha experimentado un recorte de 36 millones de euros (un 42,9 por ciento). Goirizelaia ha explicado que la inversión en la universidad vasca en 2008 suponía un 0,97 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) en 2008. En el caso de la inversión del sistema universitario vasco en investigación y desarrollo suponía en 2012 un 0,38 por ciento del PIB.
Esta última cifra refleja que se ha reducido la “gran distancia” que existía respecto a otros territorios del Estado, aunque Goirizelaia ha reconocido que aún se encuentra “muy lejos” de los objetivos fijados en el plan y de la media europea.
Por ese motivo, ha destacado la necesidad de que se ponga en marcha un nuevo plan universitario en el que, a su juicio, habría que fijar el objetivo de que la inversión en el sistema universitario vasco alcance el 1,4 por ciento del PIB para 2018.
Goirizelaia ha advertido de que, tras la “difícil” situación que se está viviendo en los últimos años como consecuencia de la crisis económica, es necesario dotar de más recursos a la diversidad vasca para “evitar el riesgo de un grave retroceso” e, incluso, “dar un paso más hacia delante”.
