Los productos locales, el plato fuerte de los jóvenes en la Semana Grande de Donosti
“Al principio no podíamos encender el fuego por el viento, el pincel se nos olvidó en casa, al probar la receta el día anterior en casa nos confundimos de ingredientes…”. Así relatan Ander Muñoz y Julen Arregui la experiencia vivida el pasado 9 de agosto en Donosti con motivo del concurso gastronómico para jóvenes con productos del país. Ellos, a pesar de las dificultades a las que tuvieron que enfrentarse, resultaron vencedores de este certamen. Con una fusión de ingredientes de pollo, piñones, miel y pimiento rojo -todos debían ser productos locales- consiguieron hacerse con la txapela y un cheque de 200 euros para compartir. Con ello, “aunque no es demasiado”, piensan invertirlo en una buena comida, “para celebrarlo”.
Aunque no es la primera vez que estos jóvenes se presentan al concurso, apenas tienen experiencia entre los fogones. “Hacemos la comida en casa cuando viene la familia, pero poco más”. Además aseguran haber ensayado “solo una vez” la receta que presentaron. Valientes, entonces, decidieron hacer esa combinación de ingredientes pero, en el momento, escuchar sus nombres como ganadores les pilló “de sorpresa”. Y no era para menos: participaban varios jóvenes y el jurado era muy “prestigioso y exigente”. Entre ellos, por ejemplo, “estaba una chica de la escuela de cocina Irizar. Que los que valoren sean cocineros así de prestigiosos y aún así haber salido victoriosos es todo un orgullo”, comentan orgullosos.
A pesar de que estos jóvenes actualmente estudian Administración y Dirección de Empresas y Filología Hispánica, este premio supone un aliciente y les anima para, en un futuro, “hacer algún cursillo o módulo” relacionado con la alta cocina, para formarse a nivel profesional. Los fogones de prestigio, en auge en los últimos tiempos, ofrece oportunidades, pero los ganadores creen que falta “un poco de promoción de estos concursos dirigidos a jóvenes”. Además, creen que es importante que también estuviera enfocado “a personas adultas”. Y es que les preocupa que, cuando vayan cumpliendo años, no puedan seguir participando en este tipo de certámenes.
Una de las razones que llevó a estos donostiarras a participar en el concurso es la importancia que le dan a que se utilicen productos locales entre los fogones. “Los productos de aquí hay que tenerlos más en cuenta. Es importante que las cocinas de grandes restaurantes apuesten por este tipo de género”, explica Ander Muñoz.
