Usted puede ser el siguiente
A Luis de Guindos, el Señor de los rescates, Europa le acaba de hacer un “José Ignacio Wert”. Ambos ministros pensaban que los poderes mágicos de la propaganda que tan bien les sirven en España y permiten convertir en éxitos los fracasos más estrepitosos también funcionaban al otro lado de los Pirineos. Ahora ya saben que no. Puede que en Madrid resulte eficaz esconderse tras un plasma, evitar las preguntas o contestar que llueve. Pero en Bruselas la propaganda no les impresiona; lo único que les preocupa es recuperar su dinero y cuando les preguntas, responden.
El ministro Wert tuvo que comerse con patatas su intento de convertir su asalto a las becas Erasmus en una operación de austeridad continental. Rubbish fue el termino técnico empleado por el portavoz de la Comisión Europea para desacreditar al titular de Educación. A Luis De Guindos le han dejado con el culo al aire en su tentativa de convencernos de que en el Eurogrupo habían comprado las cuentas de Rajoy con el mismo entusiasmo y facilidad que aquí. No nos cuadra lo del déficit, faltan 2500 millones de ajustes y el second round de la reforma laboral, declaró Olli Rehn, el comisario de Economía. De los productores de una reforma extremely aggressive, ahora llega second round, el combate final.
La respuesta inverosímil de ministerio de Economía acredita el tamaño de la mentira. Como los niños pequeños, han buscado convencernos de que ya estaba previsto y se equivocan los europeos, que no entienden bien el español. Y como los niños chicos, nos lo hemos creído. Un país que se traga casi sin rechistar que 2500 millones de ahorro saldrán de simplificar los contratos y extender el draconiano contrato definido por un año sin derecho a despido se merece el anuncio de la Lotería y debería dedicar tanta fe a causas más ambiciosas.
Semejante cantidad a ahorrar en un año solo puede salir o de precarizar aún más, abaratar todavía más los despidos, especialmente en la administración, y reducir otra vez las prestaciones por desempleo. Por la puerta de atrás cuelan una segunda reforma que nos acercará un poco más al despido libre y al mercado laboral que quieren este Gobierno y la patronal. Un mercado de trabajo precario, desprotegido, mal pagado y de mala calidad. Un mercado laboral donde puedan acudir a contratar mano de obra barata con la misma facilidad y comodidad con que compran una lavadora. La ventaja será que cuando ya no les sirva el trabajador no tendrán ni que reciclar: bastará con echarlo a la calle.
Si creía que el chantaje de un ERE masivo y las rebajas de sueldo salvajes eran solo para los trabajadores del servicio de limpieza de Madrid, sepa que no. Que ahora es la norma. El siguiente puede ser usted. Y como esos trabajadores tendrá que elegir. Nunca fue tan verdad aquello de la unión hace la fuerza. O unión o ERE, he ahí el dilema. Usted sabrá. Si no ha salido este fin de semana a manifestarse contra los recortes, antes o después, le tocará hacerlo.