Los audios de Villarejo ignorados por el juez sitúan a Cospedal en la Operación Cataluña: “Vicky cobra de la Policía”

La inacción del juzgado del caso Villarejo con los indicios que le presentó la Policía hace dos años sobre la implicación de María Dolores de Cospedal en el caso Kitchen afecta a otro episodio fundamental de la guerra sucia en la época de Mariano Rajoy, la Operación Cataluña. En uno de los tres audios ignorados por los jueces Manuel García Castellón y Antonio Piña aparece la secretaria general del PP compartiendo en 2017 las maniobras policiales contra los independentistas con el comisario José Manuel Villarejo. 

Es 12 de septiembre de 2017 y quedan poco más de dos semanas para la celebración del referéndum independentista. La grabación, de una hora y dos minutos, comienza en la calle, cuando el jefe de gabinete de Cospedal acude al encuentro de Villarejo para introducirle en la sede del PP de forma discreta, por el garaje. Se conocen de antes. Hablan de las vacaciones. José Luis Ortiz, que así se llama el colaborador de Cospedal, estuvo imputado en el caso Kitchen. Y al igual que su jefa fue exonerado por el juez García Castellón. 

Villarejo acude a Cospedal porque empieza a verse acosado por la Fiscalía Anticorrupción y el Servicio de Prevención de Capitales del Banco de España (Sepblac), dependiente del Ministerio de Economía. Hace tiempo que se conoce su implicación en el caso del 'pequeño Nicolás', en el acoso a la doctora Pinto, así como sus cuentas bancarias y sociedades en paraísos fiscales. Pide ayuda a Cospedal y esta le dice que no se preocupe. “Yo voy a hablar con Guindos y voy a hablar con la Fiscalía”, promete la entonces 'número dos' del PP a quien seis semanas después será detenido acusado de liderar una organización criminal. 

Ante la proximidad del referéndum del 1-O la conversación se ve trufada de fragmentos sobre Catalunya. “Como detecten que la Vicky está cobrando de la Policía tenemos un lío, ¿no te parece?”, dice Villarejo en un punto de la conversación. “Pues sí”, responde Cospedal. “La Vicky” es Victoria Álvarez, antigua pareja de Jordi Pujol Ferrusola, hijo del político y juzgado junto a él estos días en la Audiencia Nacional por el caso de corrupción que lleva el nombre de la familia.

Victoria Álvarez y el empresario condenado Javier de la Rosa constituyen el origen del caso, impulsado en plena batalla contra el secesionismo. Ambos cobraron de los fondos reservados, según ha quedado acreditado. En la confesión que dio origen al caso intervino el comisario Villarejo. El abogado Rafael Redondo, colaborador del policía y juzgado y condenado junto a él, recogió a Álvarez en la estación de Atocha de Madrid, la llevó a la sede de la UDEF y presenció el testimonio que dio origen al caso Pujol. 

Todo eso ocurrió a principios de 2013. La conversación en la planta noble de Génova es de septiembre de 2017 y, según acuerdan Villarejo y Cospedal, Victoria Álvarez sigue cobrando “de la Policía”. En el arranque del juicio, varias defensas han solicitado la nulidad del procedimiento por la obtención ilegal de pruebas a cargo de la “brigada política”. Las cuestiones previas se resolverán en sentencia. 

La Operación Cataluña no ha encontrado en todos estos años un juzgado que la investigue. Su existencia, revelada por elDiario.es en noviembre de 2014, ha salpicado distintas causas, pero el Juzgado que tuvo más información al respecto nunca quiso saber nada de ella. El magistrado Manuel García Castellón, instructor del caso Villarejo durante años, y la propia Fiscalía Anticorrupción consideraron que los trabajos del policía en Catalunya eran investigaciones sobre corrupción y calificaron algunos de sus descubrimientos de secreto.

Solo el comisario Eugenio Pino, artífice de la brigada política a las órdenes del PP, fue condenado en la Audiencia de Madrid por intentar introducir información de origen ilícito en el caso Pujol, maniobra abortada por el entonces juez instructor, José de la Mata. Ni siquiera la publicación de un audio de Villarejo en el que el ministro del Interior de la época, Jorge Fernández Díaz, admite estar al tanto de las maniobras policiales contra el soberanismo mereció una investigación. En esa grabación, desvelada por El País en 2022, Fernández Díaz aseguraba: “Negaré bajo tortura que esta reunión haya existido”. 

Esta es una de las grabaciones que figuran en la pieza 32, de la que la acusación popular del PSOE acaba de denunciar que fue utilizada por García Castellón como “una caja fuerte” donde depositar todo lo que no quería investigar. A esa pieza fueron a parar las grabaciones de Villarejo desveladas por varios medios de comunicación, el canal de Telegram del ultra Alvise Pérez y los audios entregados por el empresario Javier Pérez Dolset. Asuntos Internos entregó en 2023 al juez un oficio con tres audios por su relación con Kitchen, el espionaje a Bárcenas que ya se investigaba en otra pieza. Pero el resto de delitos que esconden esas grabaciones han quedado impunes. 

Según ha podido saber elDiario.es, en esas grabaciones hay alusiones al montaje de unas cuentas en Suiza de Jordi Pujol que nunca aparecieron, al caso de la cuenta falsa de Xavier Trías, conversaciones con De la Rosa para armar el caso Pujol y otras maniobras contra Artur Mas. 

Una ministra del Interior en la sombra

En la reunión de Villarejo y Cospedal que hoy reproduce este medio queda de manifiesto el conocimiento de la entonces 'número dos' del PP y ministra de Defensa de las maniobras policiales contra el procés independentista. Entre ellas, la existencia de confidentes de la Policía entre los Mossos d’Esquadra también pagados con fondos reservados. 

E igualmente, el poder que ejerce Cospedal sobre el Ministerio del Interior. La secretaria general del PP presume de haber cesado a “los DAO”, esto es, los directores adjuntos operativos de Policía y Guardia Civil que venían de la época de Fernández Díaz. “Lo que me ha costado a mí que se cambie a los DAO…”, dice Cospedal, para a continuación advertir que es un secreto que ella interfiera en la política del Ministerio del Interior. “Bueno, esto no me ha costado porque yo no te lo he dicho”, le advierte al policía. 

Villarejo le alerta sobre el carácter indolente y la incapacidad del nuevo ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, y de quien este ha elegido para ser director de la Policía, Germán López. El comisario comete un error al hacer ese comentario. Zoido era el aliado de Cospedal en las dos facciones que se disputaban el poder en el PP andaluz, frente a Juan Manuel Moreno Bonilla, que apoyó a Soraya Sáenz de Santamaría, la gran enemiga de la secretaria general. Villarejo le advierte de que a Zoido le llaman “El Zampa” en la Policía y que el director del Cuerpo es conocido como “El Zampa 2”. Cospedal le corrige: “Yo creo que el ministro no”.