La elección al Senado confirma el retroceso del campo de Macron

Los resultados definitivos de la renovación de la mitad del Senado francés confirmaron hoy el retroceso de La República en Marcha (LRM), el partido del presidente, Emmanuel Macron, en unas elecciones indirectas en las que este grupo se había hecho unas expectativas ahora decepcionadas.

La derecha y el centro acrecentaron su hegemonía, y en particular Los Republicanos (LR), que consolidaron su estatuto de primer grupo de la cámara alta con 159 senadores, 17 más de los que tenía.

LRM se quedó en 28 escaños, uno menos de los que disponía hasta estos comicios celebrados ayer en los que participaron algo más de 76.300 “grandes electores”, más del 95 % de ellos representantes de los ayuntamientos que fueron elegidos en las municipales de 2014, cuando el partido del ahora presidente no existía.

El Partido Socialista (PS), que había sufrido dos severos varapalos en las elecciones presidenciales y legislativas de esta primavera, logró limitar las pérdidas al quedarse con 81 escaños, cinco menos de los que tenía.

Una muestra más de que estas elecciones al Senado son, sobre todo, un fiel reflejo de las municipales de 2014 cuando la derecha arrasó.

Los centristas subieron su peso en la cámara alta de 42 a 50, mientras los comunistas redujeron el suyo de 18 a 12, pero podrán conservar el grupo parlamentario.

El Frente Nacional (FN) se quedó con sus dos senadores, aunque aumentó el número de votos.

El jefe del grupo LRM en el Senado, François Patriat (antiguo socialista, como muchos de sus actuales compañeros) negó que los resultados de las elecciones de ayer fueran un revés de la confianza de los franceses hacia Macron.

“Este escrutinio no puede en ningún caso interpretarse como un rechazo al jefe del Estado. Traduce el descontento de los representantes locales, y no del cuerpo electoral de las últimas elecciones legislativas. Son ellos los que han votado, a través de sus prismas de cargos electos territoriales”, precisó en una entrevista al diario “Le Parisien” publicada hoy.

Según su argumentación, “estas elecciones son el reflejo de la voluntad de revancha de los partidos 'antiguos' como el PS y LR, que han querido demostrar así que la fractura derecha-izquierda seguía funcionando”.

El mismo Patriat era el que hasta el pasado fin de semana auguraba que LRM obtendría entre 45 y 50 escaños en la cámara alta, y el que en la primera parte del verano había hablado incluso de 60.