El adelanto electoral del 28-A frena en seco las inauguraciones a la carrera en Ceuta y Melilla

Acostumbrados a gobernar con amplias mayorías absolutas desde principios de siglo, la convocatoria anticipada de elecciones generales ha atropellado el programa de fin de obras e inauguraciones de los presidentes de Melilla y Ceuta, Juan José Imbroda y Juan Vivas, ambos del PP, y ambos candidatos a repetir el 26 de mayo. La oposición en Melilla reprocha a Imbroda, un histórico del partido, que “confunda” sus cargos institucionales y orgánicos y que “utilice fondos públicos con fines partidistas”. El caso acabará en la junta electoral porque Coalición por Melilla (CpM), el primer grupo de la oposición en la Asamblea regional, denunciará este “mismo viernes” a Imbroda, también senador desde hace 19 años, para “evitar que siga usando fondos públicos en beneficio de su campaña” e “impedir que continúe confundiendo sus chaquetas institucional y de partido”. “Como no lo cortemos”, alerta el diputado de la formación localista Hassan Mohatar, “esto se va a convertir en el NO-DO hasta mayo”.

Sin la cita con las urnas del 28 de abril, el plazo hábil para cortar cintas y publicitar obras se hubiese acercado mucho a los comicios municipales  y autonómicos del 26 de mayo, cuando les toca renovar sus corporaciones. La oposición melillense se sublevó por primera vez ante el comportamiento de Imbroda el martes, el mismo día que el BOE publicó la convocatoria de elecciones generales para el 28-A que abrió un periodo en el que la legislación, de acuerdo con la intepretación de la Junta Electoral Central (JEC), exige absoluta “neutralidad” en la actuación de “todos los poderes públicos”.

Imbroda había citado el martes a los medios de comunicación locales en la desembocadura del Río de Oro pese a que la convocatoria de comicios lleva aparejada la prohibición de “cualquier acto organizado o financiado, directa o indirectamente, por los poderes públicos que contenga alusiones a las realizaciones o a los logros obtenidos, o que utilice imágenes o expresiones coincidentes o similares a las utilizadas en sus propias campañas por alguna de las entidades políticas concurrentes a las elecciones”. Igualmente está vetado “realizar cualquier acto de inauguración de obras o servicios públicos o proyectos de éstos, cualquiera que sea la denominación utilizada”.

La cita se mantuvo como una “visita” sin declaraciones pero con ronda de fotografías del político ante “la nueva canalización e iluminación” que “ha conseguido una imagen totalmente renovada y, sobre todo, se acaba con los problemas de aguas estancadas”, según la convocatoria de prensa que se envió a los medios. El presidente melillense respondió a las quejas de la oposición alegando que se limitaba “ir a ver” la fuente, a “gestionar” y a “gobernar”. “Vamos a seguir haciéndolo hasta el 26 de mayo”, avisó. Imbroda no ha contestado a las preguntas de eldiario.es sobre este asunto.

El PSOE ha reprochado al PP melillense que “hace trampas incluso antes de empezar el partido” y el portavoz de su Comité Electoral, Mohamed Mohand, ha advertido de que “dice que sigue gobernando, pero acaba de presentar dos autobuses urbanos, ha convocado cursos de formación becados para la población de los distritos más pobres de Melilla y ha adelantado con evidente intención electoralista de mayo a marzo la Semana del Mayor, en la que se invita a cientos de personas”.

Folletos con las inversiones

Las dos ciudades autónomas, que manejan presupuestos de unos 300 millones de euros al año, han llegado al final del invierno preelectoral “levantadas”, según describe Mohatar, y con sendos planes de asfaltado en marcha. “Es una táctica conocida de la Consejería de Fomento: hizo lo mismo en abril de 2015, un mes antes de los comicios locales de ese año”, recuerdan en la Agrupación de Ciudadanos (Cs) de Ceuta, donde el Ejecutivo de Juan Vivas (PP) adjudicó el pasado 25 de febrero a través de una sociedad municipal por 12.600 euros la “impresión, encuadernación y reparto a domicilio” de 15.000 folletos-revistas sobre “las inversiones que se están ejecutando en la ciudad enmarcadas en el plan de inversiones 2016-2019”.

Con el material ya elaborado, el Gobierno regional confirmó este jueves por la tarde a eldiario.es que no lo repartirá “hasta después de las elecciones de mayo” para “cumplir con la instrucción de la Junta Electoral Central de esta semana”. El segundo grupo de la oposición, la coalición Caballas, había amenazado al Ejecutivo del PP con denunciar ante la Junta Electoral de Zona un contrato menor que también había recibido duras críticas de todos los partidos de la oposición, desde el PSOE hasta Cs pasando por los localistas del MDyC.

Vivas, que encadena mayorías absolutas desde 2001 y optará a seguir en el cargo en mayo, tiene, como su homólogo de Melilla, multitud de inversiones en ejecución, pero muchas de las inauguraciones que hubiese celebrado esta primavera se verán frustradas por el adelanto de las generales. Entre ellas están la de los nuevos campos de fútbol de césped artificial de la populosa y degradada barriada del Príncipe; la de la pasarela peatonal sobre la carretera nacional de la frontera prometida hace casi seis años tras la muerte de una niña atropellada; y la de la 'joya de la corona', la reforma integral del centro histórico, con una inversión de 8 millones de euros.

Su adjudicación sin exposición a la empresa pública Tragsa, a la que la Administración encomienda desde el verano de 2017 prácticamente todos sus grandes proyectos, mantiene abierto un proceso penal por un presunto delito contra la Ordenación del Territorio en conexión con prevaricación que se cierne sobre técnicos y políticos.

El Ejecutivo sostiene que la obra tiene carácter “ordinario” y defiende las bondades de sortear las bajas temerarias y otras “complicaciones” de licitaciones con Tragsa porque es “un medio propio más” de la Administración autonómica, que a tal efecto adquirió una acción de su capital hace un año y medio. Según el PP es la oposición la que usa “electoralmente” la actuación para “enfrentar al centro con la periferia”, donde están en marcha la reconstrucción del mayor polideportivo de la ciudad y la habilitación de otros equipamientos.

Ciudadanos ha amenazado estos días al Gobierno ceutí con denunciarle hasta ante la UE por sacar a licitación por casi 100.000 euros y con un plazo de ejecución de tres meses un contrato de “servicios de elaboración de un plan de captación de inversiones estratégicas” que a su único diputado, Javier Varga, le suena “básicamente a un concurso para pagar con dinero público la confección de esa parte del programa electoral del PP”. El portavoz del Ejecutivo ceutí, Jacob Hachuel, como Imbroda, ha alegado que “no podemos dejar de trabajar porque estemos a dos meses de elecciones”