El Gobierno se queja ante el Vaticano por las críticas del embajador Fratini a la exhumación de Franco
La vicepresidenta del Gobierno en funciones, Carmen Calvo, ha dirigido una carta al Vaticano, acompañada de una nota verbal, con la cual el Ejecutivo expresa su discrepancia con las polémicas declaraciones del nuncio en España, Renzo Fratini -uno de los prelados conservadores que están contra las decisiones del gobierno y es crítico con el papa Francisco- sobre la exhumación de Franco.
El ministro de Asuntos Exteriores en funciones, Josep Borrell, ha confirmado que la misiva de Calvo ya ha sido entregada a través de la embajadora ante la Santa Sede, Carmen Peña, y que ha sido acompañada de una nota verbal de protesta.
“Esperemos que el Vaticano la conteste”, ha señalado Borrell en unas declaraciones en la sede de su ministerio, en las que ha confirmado la existencia de “contactos diplomáticos” sobre este asunto con el Vaticano, más allá de “actos formales” como la presentación de la misiva y nota.
La propia vicepresidenta Carmen Calvo apuntó ayer mismo que la embajadora ante la Santa Sede iba a trasladar al Vaticano la “discrepancia absoluta” del Gobierno con las declaraciones de Fratini, que han suscitado el rechaza del Ejecutivo desde el primer momento.
“Creemos que ha sido rota la neutralidad con la que las legaciones diplomáticas tienen que actuar. (...) Lo que se ha puesto en cuestión es una ley de los españoles, una ley de su Parlamento que es lo que el Gobierno está ejecutando y nos parece completamente inasumible”, indicó Calvo.
Este jueves, el Vaticano ha comunicado que el papa Francisco ha aceptado la renuncia de Fratini, presentada al haber cumplido los 75 años, que marcan la edad de jubilación de los prelados.