Urkullu defiende mantener las relaciones institucionales con Rajoy

El lehendakari, Íñigo Urkullu, ha sido muy crítico con el presidente Mariano Rajoy y su partido por lo ocurrido en Catalunya y la actuación policial, pero ha reivindicado el diálogo, ahora también, como la única vía para alcanzar un acuerdo que zanje la crisis. Por eso ha defendido mantener las relaciones con el presidente del Gobierno español. “Consideró que mantener los acuerdos es la cuestión más relevante del momento político que vivimos”, ha señalado en un desayuno en Bilbao.

“Tenemos que seguir manteniendo relaciones institucionales con cualquier Gobierno”, ha zanjado el presidente vasco ante las preguntas sobre cuáles son las líneas rojas para que se produzca una ruptura con el Ejecutivo de Rajoy, aunque ha reconocido que los incidentes del domingo y la actuación policial supone “traspasar las líneas rojas”. “El reto fundamental, desde el punto de vista de la responsabilidad política, es evitar cualquier forma de fractura social o política”, ha apuntado.

Urkullu no ha querido entrar a valorar los “errores” cometidos por los presidentes Carles Puigdemont y Mariano Rajoy porque “eso es el pasado”. Lo que ha reclamado el lehendakari es un proceso de “introspección” de las dirigentes políticos sobre lo ocurrido en Catalunya y una “autocrítica de todos”. Y ha reclamado un “diálogo entre el Gobierno español y el de la Generalitat” para “adecuar el principio de legalidad para que el principio democrático pueda expresarse en toda su dimensión”.

Pero esa vocación por el diálogo y el acuerdo debe venir precedida por el reconocimiento de algo. A juicio del mandatario vasco, “el punto de partida es reconocer la existencia de dos naciones que quieren decidir su futuro, en libertad y democracia, con garantías”.

Urkullu ha apuntado que “nadie sale fortalecido, nadie sale victorioso de lo vivido ayer en Catalunya”. Urkullu ha manifestado su “incomprensión ante la dirección de la estrategia policial adoptada durante la jornada de ayer” y ha revelado su “tristeza”. “Se han traspasado líneas rojas” como la de ayer en la actuación policial. “La sociedad catalana no se merece esto”.