Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Una tarde con 'Los que no se rinden': la primera asociación de España compuesta solo por personas con discapacidad intelectual

Se reúnen cada 15 días en la sede de Plena Inclusión Aragón

Óscar F. Civieta

Zaragoza —

A las 17:00 horas comienza la reunión. Hoy solo están los miembros de la Junta Directiva. Dentro de 15 días tocará rendir cuentas con los socios y socias. Sobre el tablero algún folio, bolígrafos, botellas de agua, libros de cuentas, los estatutos y papeles que buscan acomodo en los archivadores donde se escribe la historia de 'Los que no se rinden'. Ahí y en cada una de las personas que se disponen en derredor de la mesa.

Toca hablar de bancos, de los sellos que deben comprar para rubricar sus escritos (algunos apuntan alto en sus destinatarios) y de las tarjetas. Quieren ser enormes (grandes ya son), importantes, y, sobre todo, ansían mejorar sus vidas, las de ellos, las de ellas y las de todas las personas que están en similar situación

Son muy ambiciosos en sus propósitos (deben serlo), y conscientes (también deben serlo) de que en esa rectangular sala de la sede de Plena Inclusión Aragón, y aunque quizá no lo parezca, ya han hecho historia: Paco, Luis Antonio, Javier, Esther, Soraya, Estefanía, Isabel y Fernando son 'Los que no se rinden', la primera asociación de España creada y compuesta, integra y exclusivamente, por personas con discapacidad intelectual.

El empleo es lo que más les preocupa

Les costó crearla, lo reconocen, “los estatutos, el papeleo”; tras el esfuerzo llegó la recompensa: se habían constituido oficial y legalmente como asociación. Tocaba empezar a trabajar. En la actualidad son unas 30 personas, nueve forman parte de la Junta Directiva (en la reunión de esta semana falta uno) y el resto son socios. Se reúnen cada 15 días con el apoyo de Gabi, trabajador de Plena Inclusión Aragón (que es de donde surge todo el proyecto). Primero solo la Junta Directiva y a las dos semanas con todos los socios y socias.

Su principal objetivo es demostrar a la sociedad la gran capacidad que tienen las personas con discapacidad intelectual. Tienen ganas de pelear por sus derechos (y están cargados de razón). Cuando se les pide que listen, de mayor a menor importancia, los aspectos en los que hay que mejorar, dicen al unísono: “Empleo”.

De los ocho que ocupan la mesa, solo cinco están trabajando: “Queremos tener los mismos derechos que cualquier ciudadano, más oportunidades en las oposiciones, que los sueldos se equiparen a los de las personas sin discapacidad y que no nos dejen de lado. Somos como los demás”.

Nacieron en 2015, a la par que el cambio de gobierno en Aragón. Recuerdan que miembros del actual Ejecutivo autonómico fueron a hablar con ellos y les escucharon. ¿Pero sirvió de algo? “Bueno, algo se va haciendo”. También rememoran la reunión con la vicealcaldesa del Ayuntamiento de Zaragoza.

Han elaborado unos cuestionarios para que los socios y socias, y también personas ajenas a la organización con discapacidad, plasmen en ellos las principales reivindicaciones. Después, se las harán llegar al Gobierno de Aragón. Saben que para ser atendidos y escuchados deben crecer. Con ese propósito, llevan tiempo dando a conocer su proyecto en otras organizaciones y asociaciones. Su intención es involucrar a cuanta más gente mejor. Solo así lograrán que se les tenga en cuenta.

10 euros al año de cuota

La reunión está a punto de terminar. Hablan, se interrumpen y reparten tareas. Esther, la presidenta, anuncia novedades que son recibidas con alegría. Después se dirige a Paco, el tesorero: “Ese papel, por favor, que es del banco, que no se pierda”. En un sobre guarda el dinero que obtienen de las cuotas de los socios: 10 euros al año. “De momento, más o menos, nos da”, dicen con ciertas dudas.

Isabel es la secretaria, no pierde detalle de lo que se dice, todo lo apunta. Más tarde, en su casa, pasará a limpio el acta de la reunión: “Me ha dicho Esther que lo haga así”, explica. El próximo encuentro será con los socios. Hay que ser transparentes. Y lo son. No esconden nada, se muestran sinceros, amables y con una sonrisa continua en la boca. Luchan por sí mismos y por todos sus compañeros y compañeras. Son conscientes: han hecho historia.

Etiquetas
stats