¿Y si el corredor Cantábrico-Mediterráneo ya existiera y además fuera próspero?

¿Qué pasaría si el corredor Cantábrico-Mediterráneo ya existiera en Aragón? ¿Y si además fuera una de las zonas más prósperas de la comunidad? Pues que estaría ocurriendo lo que, de hecho, ya está sucediendo: el corredor de la antigua N-240, que enlaza la mediterránea Tarragona con la cantábrica Donostia, se está consolidando como el principal eje de crecimiento de actividad económica y creación de riqueza frente a la intensa concentración de ambos factores en la capital y su área metropolitana, la cual está desplazando hacia posiciones inferiores en el ránquing de renta a las principales poblaciones de Teruel.

Ese es el panorama que se desprende de los datos de las declaraciones del IRPF por municipios que elabora la Agencia Tributaria de los últimos cinco años disponibles, entre 2015 y 2020, en los que se perfilan algunas tendencias en la estructura económica-territorial que parecen tener entidad de cambio estructural.

En esos cinco años, que coinciden con el periodo entre el comienzo de la recuperación de la ‘gran recesión’ que siguió al estallido de la burbuja inmobiliaria y el frenazo en seco provocado por la pandemia y por las medidas articuladas para afrontar la crisis sanitaria, Aragón creció más en declarantes del IRPF que en habitantes, un dato que apunta a que la mejora de la actividad no siempre se refleja en el censo de vecinos, o al menos no en el cómputo global de este.

Entre 2015 y 2020, Aragón alcanzó una cifra de 1.326.235 habitantes tras haber ganado 17.672 y llegó a otra de 725.932 declarantes del IRPF, el 54% de los residentes, seis puntos por encima de la media estatal, tras un aumento de 36.651.

En ese periodo, la renta bruta media creció en 2.449 euros anuales para situarse en 26.976, mientras la disponible, que es la que queda una ves descontados los impuestos, subía a 22.160 tras un aumento de 1.746.

Tendencia general a la mejora salvo en Andorra y Escatrón

Sin embargo, las medias no suelen responder a repartos homogéneos; y este ámbito no es, ni mucho menos, una excepción, aunque sí hay un dato llamativo: entre los 25 municipios con mayor renta de Aragón solo hay dos, Andorra y Escatrón, en los que en ese lustro cayó la renta media disponible, con descensos de carácter leve (195 y 296 euros) pero que rompen la tendencia general a la mejora.

Ambas coinciden en haber vivido en los últimos años el cierre de sus respectivas centrales térmicas y en haber iniciado un proceso de reconversión hacia la energía renovable que no ha acabado de tener impactos positivos en las rentas en el caso de Escatrón y que está por ver si lo tendrá en el de Andorra.

Por el contrario, la mejora sí fue generalizada en el corredor de la N-240, cuya estructura económica se basa en un potente sistema agroalimentario sobre el que se sostiene un tejido comercial y de servicios vinculado a este.

Salvo Jaca, la localidad del eje oscense situada más al norte y cuyo sistema económico, en el que el turismo, la hostelería y el comercio aparecen como los ramos principales, sufrió con especial intensidad los efectos de los confinamientos por la pandemia, y Huesca, que se mantiene en el sexto puesto, todas las demás mejoran sus posiciones dentro del ránquing de los 25 municipios aragoneses con mayores rentas medias.

La N-240 y su área de influencia

Huesca se queda como estaba, aunque en esos cinco años la renta media de sus vecinos subió  de los 21.299 euros a los 22.893, mientras que el descenso de Jaca, que pasa del duodécimo al decimocuarto puesto, resulta simultáneo a una mejora de casi 2.000 euros (de 20.322 a 22.205) en el dinero disponible.

Los avances en todo el corredor son de una cuantía similar: Binéfar gana un puesto y sube al undécimo con un aumento de casi 2.300 euros en la renta disponible, que pasó de 20.333 a 22.622, mientras Sabiñánigo ganaba cinco puestos para llegar al duodécimo con una mejora similar a la anterior (de 20.162 a 22.384).

En las otras dos localidades de la N-240 presentan también mejoras de la renta disponible del entorno de los 2.000 euros, por encima en el caso de Barbastro (de 19.601 a 21.999), que sube del puesto veinte al diecisiete, y ligeramente por debajo en el de Monzón, que gana cuatro puestos para situarte en la vigesimoprimera posición tras avanzar ese registro desde los 19.483 a los 21.410.

La mejora de las rentas medias en ese periodo de cinco años, y pese al pinchazo de la pandemia, se hace extensiva a otras localidades situadas en el entorno de ese eje que comunica el Cantábrico y el Mediterráneo, como Tamarite de Litera (19.585 , +1.832) y, especialmente, Altorricón (20.648, +2.805) y Binaced (20.704, +2.365).

La concentración de la capital y su cinturón

En el resto de la comunidad, las dos tendencias más acusadas son la pujanza de la capital y de su área metropolitana, donde Cuarte de Huerva (25.381, +2.857), Villanueva de Gállego (24.205, +1.828) y la propia Zaragoza (23.769, +1.442) han desplazado por este orden a Andorra (13.439, -195) del primer puesto al cuarto.

La renta disponible supera la media estatal de 22.706 euros anuales, además de en Huesca ciudad, en otras tres localidades aragonesas: Cadrete (22.897, +1.956), María de Huerva (22.715, +1.977) y Pina de Ebro, más alejada de la capital y en la que la progresión ha resultado espectacular al subir 54 puestos en el ránquing autonómico en un solo año tras un avance de 5.795 que la sitúa en 22.880.

El predominio de las poblaciones del cinturón de Zaragoza llega a incluir siete de las diez primeras y diecisiete de las 25 principales, en una lista que completan Escatrón (22.444), El Burgo (22.184), La Muela (22.065), Zuera (21.953), Villamayor (21.711), Utebo (21.726), Figueruelas (21.595), Pastriz (21.165), Tauste (21.135), La Puebla de Alfindén (21.135) y Sobradiel (21.168). 

Once de las 25 localidades aragonesas con mayor renta disponible, y cuatro de las cinco primeras forman parte de la comarca central de Zaragoza, con otras dos como San Mateo y Alfajarín en los puestos 26 y 27.

Teruel, las Cuencas y el Bajo Aragón

Teruel, por su parte, sale del grupo de las diez primeras tras caer del octavo al decimotercer puesto pese a registrar una mejora de más de 1.300 euros y situarse su renta media disponible en 22.131.

Hay que descender 18 posiciones, hasta la trigesimoprimera, para encontrar otro municipio turolense, en este caso Alcañiz, cuyo registro, por otra parte, arroja uno de los mayores avances de toda la comunidad en esos cinco años, con casi 2.500 euros por cabeza, al pasar de 18.445 a 20.924.

Los siguientes, ubicados en puestos del 43 al 47, son Utrillas (20.457, +1.570), Mora de Rubielos (20.260, +4.481) y Montalbán (20.095, +1.247).