Salida de alpinismo técnico para el GMAM

Del 23 de septiembre al 5 de octubre se ha celebrado la tercera concentración de este año del Grupo Militar de Alta Montaña (GMAM) dentro del Programa de Alta Especialización de Alpinismo (PAEA) del GMAM orientada en su origen a actividades de alpinismo técnico en alturas superiores a los 4.000 metros, y adaptada a las actividades más idóneas en ese entorno, dadas las precarias condiciones de Alpes este otoño tras un verano excepcionalmente seco y caluroso.

Con una acertada gestión de las incierta y cambiante previsión meteorológica, los cinco componentes del PAEA que pudieron asistir, dirigidos por el Equipo Técnico del GMAM, comenzaron por realizar actividades los dos primeros días en el entorno de la Aiguille du Midi y Torino, entre los 3.600 metros y los 4.000 metros, desplazándose después a la zona de Cervinia, donde intentaron la escalada del Cervino, llegando bajo el Refugio Carrel a 3.700 metros. Una copiosa nevada otoñal no prevista en el parte meteorológico frustró ese primer ataque.

Volviendo el mismo día a la Escuela Militar de Alta Montaña del Ejército de Francia (EMHM), se decidió subir al Plateau de la Aiguille du Midi a escalar en roca al día siguiente, donde las diferentes cordadas escalaron diversas vías en su cara sur, con unas condiciones que exigieron la máxima capacidad como grupo, así como las propias individuales, para salir por la cima.

El mal tiempo del quinto día coincidió con el de descanso que se aprovechó para repasar técnicas de glaciar.

El sexto día, y tras comprobar que la nieve se había ido del Cervino, se hicieron dos grupos, el de los que irían a su primer cuatromil, y otro que se quedaría escalando roca en las agujas de Chamonix. El éxito fue total ya que todos los visitantes de la montaña más fotografiada del Mundo, el Matterhorn o Cervino, hicieron cima en él. Apuntar que el ascenso se hizo desde la misma Cervinia, a 2.000 metros, ya que todos los remontes están cerrados ya, y supuso una actividad muy técnica de ascenso aderezada con más de 2.500 metros positivos y negativos.

El resto escalaron los tres días en diversas zonas, sumando muchos metros de escalada de autoprotección, con largas aproximaciones y descensos, debido al cierre de los remontes.

El noveno día marcó un nuevo descanso forzado por el mal tiempo, esta vez con un frente fuerte de varios días. El Equipo Técnico se decidió por el desplazamiento hacia el sur, a la zona del Vercors, donde parecía haber una ventana de buen tiempo de un día. De esta forma, el último día de actividad de la salida se consiguió escalar en la zona de Presles, en las verticales y desplomadas paredes del macizo del Vercors, aprovechando sus más de 300 metros.

En resumen, una excelente salida en la que, pese a no haber podido exprimir el terreno mixto todo lo deseado, el grupo humano del PAEA ha vuelto más cohesionado que nunca, y con mucha más experiencia de cara al objetivo final del proyecto, la Expedición al Himalaya del 2020.