Silencio sepulcral en la sede del PP de Cantabria: ni militantes ni altos cargos se dejan ver
La sede del Partido Popular de Cantabria, situada en el Hotel Santemar de Santander, es en estos momentos un cementerio, donde prima un silencio sepulcral y la ausencia de caras conocidas: los altos cargos de la formación conservadora siguen sin aparecer y los afiliados no han hecho acto de presencia. Solo los periodistas y profesionales de los medios de comunicación están siguendo el escrutinio en directo.
A los malos resultados que anticipan los datos a nivel autonómico, donde los populares dejarían de ser primera fuerza después de varias décadas de hegemonía, con un éxito sin precedentes del PRC de Miguel Ángel Revilla, se suma la posibilidad de perder también por primera vez en democracia la Alcaldía de Santander. La actual regidora, Gema Igual, y su equipo en el Ayuntamiento, no ha venido aún a la sede del PP a seguir los resultados.