La creciente preocupación social en torno a la salud mental y los datos que van recabando los especialistas tras superar la fase más aguda de la pandemia reflejan la necesidad de intervenir en una materia que durante muchos años ha estado prácticamente silenciada. El crecimiento de los intentos de suicidio, el aumento de los problemas psiquiátricos en niños y adolescentes o la cada vez mayor concienciación sobre enfermedades como la depresión o la ansiedad tendrán una respuesta más contundente a partir de ahora en Cantabria, tras la aprobación de un Plan de Salud Mental con el horizonte de 2026 que mejorará la dotación económica y los servicios de atención a estos pacientes.
Y es que esta ha sido la medida estrella anunciada este jueves por el vicepresidente y portavoz del Ejecutivo cántabro, Pablo Zuloaga (PSOE), que ha explicado en una rueda de prensa tras la celebración del Consejo de Gobierno las principales medidas de un Plan de Salud Mental que define y establece “las actuaciones más efectivas para mejorar el conocimiento de los niveles de salud mental y ofrecer la mejor atención posible a las necesidades en esta materia a la ciudadanía de Cantabria”.
Según ha explicado, el plan es fruto del trabajo de más de 170 expertos de diferentes ámbitos desde mayo de 2021, que en este año y medio han ido promoviendo acciones necesarias en Cantabria, combinando planificación y acción “para una máxima agilidad en la respuesta a las necesidades de la población en materia de salud mental”.
Ya hace unos meses que la Consejería de Sanidad había avanzado que estaba poniendo en marcha una estrategia de choque de atención infanto-juvenil en materia de salud mental ante el incremento “ostensible” de intentos de suicidio y trastornos en la conducta alimentaria, entre otras patologías, de los más jóvenes.
Según los datos proporcionados por las autoridades sanitarias, los trastornos de la conducta alimentaria se han incrementado un 75%, sobre todo en mujeres, mientras que de los intentos de suicidio no se han ofrecido cifras concretas, aunque sí la apreciación del incremento notable de casos tratados tanto en las urgencias como en la hospitalización general.
Fue la propia Asociación de Directores y Directoras de Educación Secundaria de Cantabria (ADIESCAN) la que pidió ayuda a la Consejería de Educación a principios de año ante el incremento de los trastornos de la salud mental del alumnado como consecuencia de la situación “muy convulsa” que sufre la sociedad desde hace dos años por los “estragos” de la COVID-19.
Detalles del Plan
El vicepresidente ha explicado durante su intervención ante los medios que el nuevo plan continúa con la labor comenzada en el periodo 2014-2019, pero realizando un análisis de la situación actual y “dando respuesta a los nuevos retos que se plantean, incluidos los derivados de la pandemia”.
Zuloaga ha indicado que el plan tiene como marco de referencia la Estrategia de Salud Mental del Sistema Nacional de Salud 2022-2026 y está alineado con el Plan de Salud Mental 2022-2024 del Ministerio de Sanidad, herramientas que permitirán impulsar acciones conjuntas, algunas de las cuales incluyen cofinanciación por parte del Estado.
El vicepresidente ha indicado que el plan pretende sentar la base de “cómo queremos que sea la atención a la salud mental en los próximos años en Cantabria” y “tiene valores transversales como la humanización de la asistencia, la promoción y prevención de la salud mental, el enfoque de género, la continuidad asistencial, la calidad y seguridad de los pacientes o la formación continua”.
Tal y como consta en los acuerdos del Consejo de Gobierno, plasma a través de seis líneas de acción relacionadas con la salud mental en Atención Primaria y a la comunidad; el trastorno mental grave; la atención a los mayores o más frágiles; la atención mental a la infancia y adolescencia; y la atención mental a personas con conductas adictivas o a personas con necesidades específicas.
Hasta el momento, el Plan ha permitido la incorporación de seis facultativos, entre psiquiatras y psicólogos clínicos. Otras actuaciones para ejecutar en los próximos meses serán la creación de una unidad de hospitalización en Pediatría, la ampliación por la tarde del horario de atención en el hospital de día o la creación de una unidad de agudos en Sierrallana.
Nueva tecnología
Por otro lado, también en materia sanitaria, el Gobierno ha aprobado un contrato para llevar a cabo la adecuación de las salas de angiografías, TAC y resonancia del Servicio de Radiodiagnóstico del Hospital Valdecilla con una duración de seis meses y un presupuesto de 4.551.850 euros.
Se trata de un contrato para la ejecución de obras para equipamientos que se financia a través del Plan Inveat del Gobierno de España, que sufraga equipos de alta tecnología. En Cantabria, permitirá la inversión en 19 nuevos equipos, dos en Sierrallana y 17 en Valdecilla, entre los que se incluyen los angiógrafos --para los que se ha aprobado la obra--, el TAC y la resonancia, que han supuesto una inversión de cinco millones de euros.