Despedidos de la Fundación CCM plantean crear una asociación para actuar contra la entidad
Los trabajadores despedidos de la Fundación Caja Castilla-La Mancha se están planteando poner en marcha una asociación que les permita actuar en los tribunales contra la entidad al margen de la vía estrictamente laboral.
Una asociación, “aún en fase de germen”, según los propios trabajadores de Fundación y que, entre otras cosas, podría centrar su demanda en aspectos como lo que consideran “administración desleal” por parte de la entidad.
En total el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) ha afectado a ocho trabajadores en Toledo, seis en Albacete y cuatro en Cuenca. Todos ellos han visto reducida su nómina a la mitad desde que terminó el ERTE, Expediente de Regulación Temporal de Empleo que ha terminado por convertirse en definitivo.
CCOO ha liderado la oposición a los despidos en los últimos meses aunque ha declinado plantear un conflicto colectivo para evitar así perjudicar los intereses de los trabajadores a título particular. En este sentido, ha puesto a su disposición la asesoría jurídica del sindicato en aquellos casos que opten por una demanda laboral de forma individual.
Comisiones Obreras anunció desde el principio su rechazo “frontal” a este ERE extintivo que supone el cierre de centros culturales y de mayores porque, en su opinión, los despidos pueden ser “ilegales”, ya que considera que el organismo cuenta con patrimonio suficiente para mantener los puestos.
Los centros afectados son los culturales y de mayores de Albacete, Toledo y Cuenca, además del Palacio de Benacazón en la capital regional y la Finca Albadalejito en Cuenca.
