135 despidos en el nuevo ERE de la multinacional ADVEO
La multinacional ADVEO, que cuenta con un importante centro de trabajo en Albacete, ha anunciado un Expediente de Regulación de Empleo en España que supondría el despido de 135 de sus trabajadores, aunque todavía no se ha definido el número concreto de la planta de Albacete, ni en sus otros 5 centros de producción. Para manifestar su rechazo los 130 trabajadores de la antigua Adimpo están convocados a la huelga los día 5 y 6 de mayo.
“Se trata del segundo proceso de estas características que lleva a cabo la empresa en apenas dos años, amparándose en la injusta reforma laboral aprobada por el gobierno al comienzo de la legislatura y que permite al empresariado minimizar costes siempre a costa del trabajador”, denuncia Pilar Segovia, responsable de Fecoht-CCOO en Albacete.
En esta ocasión, el ERE afecta a toda la estructura de la empresa en España, lo que según fuentes sindicales “conllevará un debilitamiento competitivo de Adveo y cuestiona su viabilidad futura, además de poner en riesgo cientos de puestos de trabajo indirecto que se perderán debido a la actitud irresponsable de la dirección de la empresa”.
“Tras un análisis en profundidad de los datos económicos e informes técnicos con los que la empresa argumenta su decisión, la representación sindical entiende que no concurren causas suficientes que justifiquen los 135 despidos y la eliminación de estructuras” advierte Segovia, que recuerda que Adveo pertenece a un grupo internacional de empresas que ha repartido cuantiosos dividendos durante los últimos años pese a la crisis económica y del sector.
Adveo-España nació de la transformación empresarial a lo largo de los años del Grupo Unipapel, que se constituyó en el año 1976, producto de la fusión de tres empresas (Papyrus, Segundo Moreno y Vascongada de sobres y bolsas), cuya actividad principal era la fabricación de material escolar y de oficina. En 2009, Unipapel adquirió Adimpo, uno de los principales mayoristas europeos especializados en consumibles informáticos, con filiales en Alemania, Italia, Francia, España y Portugal y radicada desde 1978 en Albacete, donde llegó a contar con una plantilla de más de 200 trabajadores; que en la actualidad, tras el goteo de despidos que viene produciéndose desde 2010, se ha reducido a poco más de 130.