Los valencianos, desconfiados con la clase política
La sociedad valenciana es plural y tolerante, está preocupada por la situación económica, el paro y la reducción de su calidad de vida a corto y medio plazo y se muestra desconfiada con la clase política.
Así lo refleja la Encuesta de Valores presentada esta mañana por el president de la Generalitat, Ximo Puig, y el vicerrector de Cultura de la Universitat de València, Antonio Ariño, quien ha destacado la importancia de recuperar estos sondeos, que no se realizaban desde el año 2000.
La encuesta revela que los valores más importantes para los valencianos son la tolerancia y el respeto a los demás (83,7 %), el sentido de la responsabilidad (78,5 %) o el esfuerzo en el trabajo (60 %), y que dan valor a formarse una opinión propia (con 9 puntos sobre 10) o ser solidario con los que están peor (8,9 puntos).
Se trata, según el president de la Generalitat, de los valores “más positivos de una sociedad avanzada” y que demuestran “la buena salud de una sociedad” y ha asegurado que la valenciana es una sociedad de la que sentirse “orgulloso”.
La mayoría de encuestados (el 90 %) defiende la igualdad entre hombres y mujeres, aunque todavía hay una “minoría significativa” que piensa que cuando una madre trabaja fuera de casa los hijos sufren (el 42,5 %) o que dedicarse a las tareas del hogar puede ser igual de gratificante que tener un trabajo (38,6 %).
Las principales preocupaciones de los valencianos están relacionadas con crisis económica y la pérdida de calidad de vida, ya que el 97 % está muy o bastante preocupado por que se puedan reducir las prestaciones sanitarias, el 92,2 % por no poder cobrar la pensión, y el 89,3 % por el futuro laboral de sus hijos.
El futuro, “sombrío”
Para Ariño, esto refleja que los valencianos ven su futuro más cercano y a medio plazo “sombrío”, aunque el 84 % de los encuestados asegura no haber vivido ninguna situación relacionada con la pobreza, frente a un 25 % que atraviesa alguna situación de necesidad grave.
Los valencianos también se muestran tolerantes con la libertad sexual (84,7), y ven justificados el sexo antes del matrimonio, la homosexualidad, el divorcio, la eutanasia, y en menor medida el aborto.
Por el contrario, ven prácticamente injustificado la violencia contra otras personas, aceptar sobornos, robar, engañar con los impuestos, que los padres impongan castigos a sus hijos, reclamar ayudas públicas a las que se sabe que no se tiene derecho, no pagar en el transporte púbico o el suicidio.
Por otro lado muestran una gran desconfianza en la clase política, pues el 71,4 % no cree que al gobierno le importe mucho lo que piense la gente; el 62,6 % cree que no se puede confiar en que los gobernantes actúen de la forma adecuada, y el 72,2 % cree que los políticos están en política solo para sacar un beneficio personal.
Corrupción generalizada
Sobre la Comunitat Valenciana, la mayoría (el 72 %) cree que la imagen que se tiene de esta autonomía en el resto de España es que la corrupción está generalizada, aunque el 58,8 % piensa también que en la Comunitat hay la misma corrupción que en otras zonas de España.
En cuanto a ideología, Ariño ha destacado que los sectores que más han crecido desde el año 2000 son los dos del centro, que ha pasado del 27,8 % al 33 %, y la extrema izquierda (del 5 al 10 %), mientras que el espacio de la derecha ha caído, excepto la extrema derecha que ha subido del 2,3 al 3,3 %.
El president de la Generalitat ha defendido la utilidad de este tipo de encuestas tanto para quienes tienen que tomar decisiones políticas, como para cualquier investigador, y ha anunciado la creación de una web específica, que se prevé que funcione a partir de septiembre, en la que se publicarán todos los sondeos de los que dispone la Administración.
La Encuesta de Valores se realizó a un total de 2.018 valencianos de manera presencial en su domicilio, entre el 20 de febrero y el 10 de marzo, y su error muestral es de más/menos 2,2 %, con un índice de confianza del 95 %.