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La desaladora de Torrevieja salva a Alicante de la sequía: genera el doble de agua en tres meses que el Tajo-Segura

Planta desaladora de Torrevieja.

Sergi Pitarch

El 60% del agua que sale de los grifos del sur de la provincia de Alicante -incluidos los de Alicante y Elche- proviene de la desaladora de Torrevieja. El Gobierno de España facilitó unas subvenciones para que los agricultores puedan utilizar el agua de esta planta que, aunque más cara, puede llegar en función de la demanda a los campos de la zona que, junto a Murcia, se están convirtiendo en la huerta de Europa.

La ministra de Agricultura, Isabel García Tejerina, ha visitado la planta este lunes junto al delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues, y la consellera de Medio Ambiente, Elena Cebrián, para comprobar las mejoras y las necesidades para conseguir que la planta pase a tener una capacidad de 80 hectómetros cúbicos anuales a 120. Una verdadera salvación para una provincia que con el cambio climático y la nueva conciencia medioambiental tiene como única salvación la extrema reutilización y la desalación del agua.

Tras las últimas lluvias y nevadas del invierno, el próximo 3 de abril se aprobará si se vuelve a reactivar el trasvase Tajo-Segura al haber superado la cuenca excedentaria los 400 hectómetros cúbicos de capacidad en sus embalses de cabecera. Como mucho, según fuentes conocedoras de las negociaciones, el máximo que se podría trasvasar entre cuencas en la actualidad serían 5 hectómetros cúbicos.

Este volumen de agua, que en el pasado hubiera sido la salvación acredita la importancia que para Alicante tiene la planta de Torrevieja. Y es que la desaladora ha generado entre el 1 de enero y el 11 de marzo 9,1 hectómetros cúbicos de agua potable. En 2017 la producción fue de 44,3 hm/3, en 2016 de 33,5 y en 2015 de 12,8.

En estos momentos, el único problema de la desaladora es el coste de la energía, puesto que la propulsión del agua para pasar por el tamiz que elimine la sal necesita de muchos recursos eléctricos. El Gobierno está subvencionando a los agricultores para que puedan acceder al agua, algo que, por cierto, se hace con toda la agricultura de la Europa Central -Francia sobre todo- pero no solo a nivel genérico. ¿Qué es si no la Política Agraria Común? En estos momentos el metro cúbico se abona a 0,48 euros pero la intención es que en el futuro y con la máxima eficiencia el precio baje de los 0,40 euros por metro cúbico.

La desaladora de Torrevieja -en la que se han invertido 271,2 millones de euros- es la prueba de que el futuro está en la reutilización y la desalación y no en los trasvases, que en la actualidad y por la sequía generan grandes enfrentamientos entre territorios. De hecho, el Gobierno de Castilla-La Mancha se opone a la próxima transferencia Tajo-Segura tras haber recuperado el caudal ecológico. El actual Gobierno del PP parece haber entrado en razón y ya desecha las comunicaciones entre cuencas para invertir en otras soluciones como la que este lunes la propia Tejerina y Moragues han defendido. Este lunes se han anunciado otros 45 millones de inversión para que la planta supere los 120 hectómetros cúbicos al año. 

¿Habrá algún día en que la agricultura de Alicante y Murcia -de las más rentables de España- puedan autoabastecerse? No queda otra.

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